Madrid-Barcelona.com
·9 de junio de 2021
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·9 de junio de 2021
No es fácil para los jóvenes valores de la cantera madridista hacerse con un hueco en la plantilla profesional del Real Madrid. La intención del club era firmarles un contrato profesional a Gutiérrez y Blanco para incorporarles de pleno derecha a la primera plantilla del club. Pero la plantilla es tan numerosa que no podrán acceder a su sueño si antes no se producen bajas. Marcelo y Ceballos, por ejemplo.
Zidane dio el OK y Ancelotti su bendición para que Miguel Gutiérrez dé el salto definitivo al primer equipo, pero el club no se lo ha podido garantizar. Los planes de la secretaría técnica pasaban por la baja de Marcelo, que cobra 8 millones netos, para ser suplida por Miguel Gutiérrez como suplente de Mendy. De esta forma, consideraciones deportivas al margen, el club conseguía una importante rebaja en la masa salarial al sustituir a Marcelo por Gutiérrez.
Pero la llegada de Ancelotti ha invitado a Marcelo a probarlo de nuevo con un técnico con el que vivió buena parte de sus mejores momentos. Si Marcelo sigue, Gutiérrez no podrá tener ficha del primer equipo.
El Real Madrid tiene ahora mismo 21 fichas asignadas en su primer equipo, a las que hay que añadir las de Bale, Jovic, Odegaard, Ceballos, Brahim y Vallejo, que vuelven después de sus cesiones.
Gutiérrez, por el que han llegado al club numerosas ofertas reclamando su cesión, no seguirá en el Castilla. La Segunda B se le queda pequeña. El club intentará hacerle un hueco en su plantilla, pero si no es posible marchará cedido a la espera de una mejor oportunidad para formar parte de la plantilla madridista.
En la misma situación está Antonio Blanco, otra de las gratas sorpresas que ha dejado la temporada. El retorno de Ceballos le deja fuera de la plantilla profesional, aunque el club preferiría contar con él y con Gutierrez en el primer equipo.
Hasta que finalice el mercado de invierno pueden suceder muchas cosas, y varios de los cedidos que ahora regresan volverán a marchar provisional o definitivamente. De eso depende que Gutiérrez y Blanco encuentren acomodo en el primer equipo madridista.