Liverpool venció a Chelsea y ganó la EFL Cup tras una década | OneFootball

En un escenario ideal, con Wembley a pleno viviendo un encuentro entre dos enormes clubes de la elite de Inglaterra, se definió la Carabao Cup. Tras el 0 a 0 durante los 90 minutos reglamentarios y el tiempo extra, Liverpool venció por 11 a 10 al Chelsea en los penales y celebró el título en Londres.

En unos primeros minutos muy parejos, Los Rojos originaron las primeras aproximaciones de peligro con pases filtrados para Luis Díaz y Sadio Mané, pero los extremos no lograron superar la linea defensiva de los Blues. Por su parte, Los dirigidos por Thomas Tuchel apostaron al contragolpe por intermedio de Mason Mount pero sin mucha efectividad.

A la media hora del primer capitulo, Liverpool desperdició una gran oportunidad para abrir el marcador. Naby Keita remató de media distancia pero Edouard Mendy tapó el derechazo. El rebote le quedó a Mané, pero Mendy volvió a evitar la caída de su arco con una gran atajada.

Un par de minutos después, los Blues respondieron con un gran contragolpe conducido por Havertz, quien asistió a Pulisic, pero el derechazo del norteamericano fue detenido por Caoimhin Kelleher para mantener la paridad en la contienda. Cuando agonizaba el período, Havertz envió un preciso centro para Mount, pero el delantero desvió su remate por el palo izquierdo para marchar al entretiempo sin diferencia en Wembley.

En el amanecer del suplemento, el elenco londinense volvió a dejar pasar una ocasión dorada para ponerse en ventaja. Havertz habilitó a Mason Mount, pero el británico estrelló su tiro en el poste izquierdo. A los 18, Mendy regaló el esférico, Salah definió con categoría pero Thiago Silva salvó el balón sobre la linea para evitar el primer grito del juego.

Tras una jugada preparada al borde del área, Arnold habilitó a Mané, el extremó asistió a Matip, el zaguero anticipó a sus rivales y cabeceó al fondo de la red, pero tras recibir el llamado del VAR, el juez anuló el tanto de los Reds. En el tiempo adicional,  Virgil van Dijk fue más que sus rivales pero Mendy voló para ahogarle el grito al neerlandés. Por el otro lado, Marcos Alonso habilitó a Lukaku, pero Kelleher tapó el taco del belga.

Una verdadera final, apasionante y con llegadas de ambos lados, continuó con en el tiempo extra. A los 7 del primer suplementario, el VAR le anuló un gol a Lukaku que picaba al vacío pero para la tecnología lo hizo en offside. Cuando cambiaron de lado le invalidaron un festejo a Havertz por la misma tónica. Así respiraban los muchachos de Jürgen Klopp.

Wembley vivió 120 minutos de fútbol de alto vuelo y todo acabó dirimiéndose en la lotería de los penales. Tras un show de aciertos, se vieron olbigados a patear los guardametas. El irlandés, Caoimhin Kelleher metió el suyo. Kepa Arrizabalaga, que había entrado para atajar, falló el del Chelsea. Y tras el 0 a 0, Liverpool gritó campeón ganando 11 a 10 desde los doce pasos.

Foto: Photo by Michael Regan/Getty Images