Lionel Messi y Luis Suárez, dueños de una era | OneFootball

No hay dudas acerca de la importancia de Lionel Messi y Luis Suárez en las selecciones de Argentina y Uruguay. Se puede debatir la posición que ocupan en la historia, pero su influencia es algo palpable para cualquier aficionado al fútbol.

Messi es el buque insignia de Argentina, capitán y el hombre por el que pasa todo el juego de la albiceleste. Es casi imposible imaginar una Argentina competitiva sin el ‘10’. A Leo le persigue la comparación con Maradona, ídolo en el país argentino por sus logros con la selección, algo que a Messi todavía no le alcanza, pero que este verano tendrá una nueva oportunidad.

Luis Suárez forma parte de un selección uruguaya con grandes nombres y que se alzó con la Copa América 2011, siendo nombrado mejor jugador del torneo y por el camino eliminando a Argentina.

Si nos vamos a los números, ambos han tenido una participación decisiva en los logros de sus respectivas selecciones.

Los números hablan bien a las claras de la influencia e importancia de ambos jugadores, que sin embargo no han podido brillar  todo lo que les hubiese gustado.

Messi tiene la espina clavada de ganar un Mundial, ya que fracasó en 2006, si bien aún era un niño y ni mucho menos una referencia en la selección, 2010, donde Argentina fue eliminada por Alemania en cuartos de final con un sonrojante 4-0 y en 2014, cuándo la albiceleste llegó a la final pero se volvió a cruzar con Alemania, que venció por 1-0 con un gol de Götze.

También fueron duras para Leo las derrotas en las finales de Copa América 2015 y Copa América Centenario. Ambas ante Chile y en los penales. De hecho, la derrota en esta última propició la renuncia de Messi con la Selección.

“Para mí se terminó la selección. Ya lo intenté mucho, me duele no ser campeón con Argentina y me voy sin lograrlo. Es increíble, pero no se nos da. Hoy nos pasó otra vez y otra vez los penales. Son cuatro finales las que me tocó perder, tres seguidas. La verdad que es una lástima, pero tiene que ser así. No se da, lo intentamos, lo buscamos y ya está”, declaró un Messi abatido, si bien es cierto que un mes y medio después cambió de opinión y anunciaría su vuelta a la albiceleste.

Por su parte, la exigencia de Luis Suárez con Uruguay no es tan grande como la de Messi con Argentina, si bien el combinado charrúa siempre está llamado a hacer buenos papeles en las citas importantes.

Además de la ya mencionada Copa América 2011, donde Uruguay salió campeón, Suárez también disputó el Mundial 2010, siendo el equipo charrúa cuarto clasificado con una gran actuación del delantero a lo largo de todo el torneo.