Leicester consiguió oxígeno en un show de goles ante Aston Villa | OneFootball

Los Foxes sacaron tres puntos de oro en el sueño de lograr la permanencia en la Premier League. En la tardenoche del Villa Park, los dirigidos por Brendan Rodgers no tuvieron piedad ante los Villanos y le propinaron un 4 a 2 que alimenta el ego para lo que resta.

Aston Villa abrió la cuenta a los 8 minutos del primer tiempo con un lindo zurdazo de Emiliano Buendía que se estrelló en el travesaño. Danny Ward había volado para frenar el misíl del argentino y por eso dejó desguarnecido el arco de Leicester que se vulneró cuando con la arremetida de Ollie Watkins.

La felicidad para el local duró poco. Emiliano Martínez arriesgó mucho en la salida, Boubacar Kamara perdió la pelota en la puerta del área grande, y por más que el «Dibu» haya atorado a Kelechi Iheanacho, el esférico le quedó servido a James Maddison que definió con toda la cueva a su merced.

La calma para Aston Villa parecía volver apenas transcurrida la media hora inicial con un gol en contra del escocés Harry Souttar. Sin embargo, en una ráfaga furiosa antes de la complementaria, Leicester consiguió no sólo la igualdad sino también dar vuelta la historia.

A los 40 minutos del primer tiempo, Harvey Barnes metió un centro desde la izquierda y el nigeriano Iheanacho de palomita puso el 2 a 2. Un ratito más tarde, justo antes del descanso, los de Rodgers anotaron nuevamente con otro desacierto defensivo del dueño de casa.

Se jugaban los segundos finales del capítulo inicial cuando Iheanacho, nuevamente partícipe en la jugada de un gol para los Foxes, filtró un pase entrelíneas. Mateus Tetê le ganó la espalda a Tyrone Mings, dejó en el camino al «Dibu» Martínez y puso el 3 a 2.

En la complementaria pasó de todo porque la visita no supo liquidarlo en dos ocasiones de Mateus Tetê y el equipo de Unai Emery lo empató por intermedio de Philippe Coutinho aunque luego el festejo del brasilero quedó anulado. Y en un show de desacoples en la última línea, los vestidos de azul bajaron la cortina.

Faltaban diez para el cierre, el resultado estaba abierto, pero Álex Moreno falló de manera inexplicable a la hora de cortar un pase de Harvey Barnes. El que aprovechó fue Dennis Praet y el belga, esquivando nuevamente al arquero argentino, colocó cifras definitivas.

Leicester City necesitaba una victoria clave para escaparse aún más de los puestos de descenso y la consiguió con un épico 4 a 2 en condición de visitante. Aston Villa pagó carísimo un sinfín de errores en la retaguardia para quedarse con las manos vacíos en la tardenoche del sábado.

Foto: Photo by Catherine Ivill/Getty Images