Offsider
·16 de septiembre de 2021
Offsider
·16 de septiembre de 2021
Primera parte de dominio inglés
El primer tiempo empezó lo que fue el guión de gran parte del partido. El Leicester se lanzaba al ataque, con un Barnes sobre saliente, actuando por banda izquierda y siendo un gran problema para la defensa napolitana, con Iheanacho acompañándole en las internadas ‘foxes’.
Y fue Barnes quien regaló el gol del equipo local. Un caramelito en forma de asistencia a su compañero español Ayoze, que con un derechazo ponía el 1-0 en el minuto 9 de la primera mitad.
A partir de ahí, un rodillo inglés. El Leicester se imponía claramente a unos italianos que no sabían como responder a las internadas inglesas. El mejor jugador del Nápoles era, sin duda, era el colombiano Ospina, que se mostraba muy seguro bajo palos.
A pesar de la superioridad del Leicester, el conjunto de Rogers no conseguían ampliar su ventaja, yéndose al ecuador por un 1-0 apretado.
Segunda parte de alta intensidad ‘fox’
La segunda parte del encuentro, en realidad, fue un calco del primer tiempo, exceptuando los últimos minutos. Un Leicester muy superior ante un Nápoles sin ideas, frío, con dificultades al llegar.
El Leicester avisaba, y avisaba de verdad. En el minuto 54, el conjunto inglés veía como le anulaban el 2-0, pero las sensaciones eran muy buenas. De hecho, apenas en el minuto 64, Barnes sí que ponía el 2-0. Un zurdazo desde dentro del área hacía imposible el intento de parada del guardameta colombiano. La afición celebraba la victoria, pero el Nápoles levantó la cabeza.
Y es que en el 70, Osimhen ponía el 2-1 con una vaselina imposible para el portero danés de los ‘foxes’. Y es que el Nápoles hizo lo que no había hecho en todo el partido; atacar. En el minuto 90, Osimhen ponía un cabezazo muy notable para tumbar a Schmeichel. 2-2 a la épica para dar un puntazo al Nápoles.