Las sanciones de la Copa de la Reina | OneFootball

Es lunes y comenzamos la rutina de la semana, una caminata junto al tumulto de gente que nos guía hacia nuestro sitio en el metro, luego de esquivar la ansiosa carrera para tomar la ubicación en el vagón, cual concierto de tu banda preferida, logramos asiento.

Un primer triunfo de lo que aspiramos sea una buena semana, el celular de la chica que se sentó junto a mí no deja de pasar el vídeo de Carletto regalando hoy ya los famosos Chicles. Al frente mío el rudo olor a café acompaña los dedos de un personaje que no deja de hacer malabarismos entre el mensaje que escribe, el movimiento que causa la rapidez del viaje y no tirar la humeante bebida que le acompaña, para finalizar no podía faltar el periódico deportivo con símbolo rojo a toda página con el nombre de una carta, nada nuevo bajo el sol del primer día de la semana.

Ya cuando el cambio de pasajeros que va marcando las estaciones, un fuerte olor a cigarro que ingresa con el aire de la puerta me hace poner atención a una animada charla, que me hace recordar algunas discusiones de los llamativos Spaces del sitio incorrecto…que el Barcelona de Aitana…que el Madrid de Weir…que la Real Sociedad de Nerea. Ellos mejorando el mundo en los minutos de discusión que tardan en llegar a su destino, debaten gesticulando animadamente.

El fútbol Femenino definitivamente ya ocupa los espacios que nadie podía imaginar y que muchos aún se esfuerzan en no aceptar. La sorpresa no deja de ser mi compañera de viaje, cuando un señor que podría ser su padre les dice… ¿Y qué opinan del cobro ahora para ver el fútbol que era gratis? Dios…se abre la caja de Pandora y nace la frase que da título a esta columna… Estoy pensando seriamente en “Si Decido Quedarme” no piensan en el Bolsillo… Todo lo hacen mal, uno de los espontáneos contertulios saca el tema “¿Alguien sabe si ya se conocen las sanciones de la Copa de la Reina?” El silencio se apodera de unos escasos segundos, los mismos que marcan la llegada a la estación y mi desconexión del tema, pues avanzó animado a tomar lugar a mi escritorio donde doy inicio a esta columna. Las horas pasan lentamente y el dedo se hace uno con el botón F5, definitivamente algo hay que todo caminaba muy tranquilo en espera de un anuncio que nunca llego.

Avanzada la noche y las manecillas del reloj, los rápidos y bien relacionados del Chiringuito a diferencia de lo que esperábamos, hacían el anuncio con la música que tanto les gusta usar EXCLUSIVA dando por eliminados al Sevilla Femenino y al Barcelona Femenino. Notas aparte el rostro de la periodista que, por intermedio de un contacto, hace la típica aparición del minuto, donde más resta que suma al contenido del momento.

En horas de la mañana. Salía definitivamente las sanciones en la Web de la RFEF ya confirmando una esperada noticia , 2 semanas, si aunque suene increíble, 2 semanas han pasado para conocer esta definición. Miles de interlocutores se pueden leer, oír, el discurso o noticia puede gustarte más o menos, pero no deja de ser algo que se conocía y solo se ha confirmado.

Como en rueda de prensa a dicho Xavi  entrenador del equipo masculino “Ha sido un error nuestro y nos eliminan de la Copa de la Reina Femenina, hay que aceptarlo, es una responsabilidad nuestra”. Dentro de todos los detalles, se habla dentro de todos los sonidos,  que habrá apelación en estos 10 días que el reglamento lo permite. ¿Cambiará algo luego de tanto tiempo de espera? Cada lector tiene su propia opinión de esto. El asunto parece no terminar aquí…salen bastantes especulaciones a escena en diferentes redes…se vuelven a abrir heridas, suposiciones, pero una cosa está clara.

Todas estas indefiniciones que hacen que quien escribe no comprenda la tardanza y nos hacen volver atrás al día de ayer, donde ese seguidor del nuevo fútbol femenino, como usted o como yo, ya algo decepcionado o aburrido de tanto ruido decía “Si decido quedarme”. Esperemos que todo ya camine definitivamente por las regulaciones esperadas y que el Fútbol Femenino con estos pasos atrás, sean definitivamente para tomar impulso y dar el salto que todos los entes esperamos, para disfrutar de la llamada tierra prometida.