La maldición de Zinedine Zidane con la Copa del Rey | OneFootball

El Real Madrid ha comenzado su andadura esta temporada en la Copa del Rey, un torneo con un nuevo formato a partido único que no permite despistes como los que ha venido sufriendo Zinedine Zidane en este torneo tanto en su etapa de jugador merengue como de entrenador.

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La última vez que los blancos alzaron la Copa del Rey fue en el curso 2013-14 con Carlo Ancelotti como técnico y el francés como segundo entrenador en una recordada final ante el Barcelona que se acabó decidiendo con un golazo de Gareth Bale. Sin embargo aquella final como asistente es uno de los pocos recuerdos agradables que el preparador galo guarda de la Copa, un torneo que no se le ha dado bien como entrenador ni tampoco como jugador.

Como jugador, Zidane jugó dos finales del torneo del KO de infausto recuerdo para el madridismo, ya que fue titular en la final del Centenariazo en 2002 en la que el Deportivo de La Coruña venció por 1-2 a los blancos en el Santiago Bernabéu en el día que los merengues cumplían 100 años.

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En 2004, el Madrid volvió a la final y la perdió por 2-3 ante el Zaragoza en Montjuic, Zidane pudo jugar la final pese a haber sido expulsado en la vuelta de  las semifinales ante el Sevilla pero tampoco pudo ganar el trofeo. Antes en 2003 el Mallorca eliminó a los blancos en cuartos de final con un sonrojante 4-0 contra los blancos y la historia se repitió en 2006 cuando cayeron ante el Zaragoza tras un histórico 6-1 en La Romareda, que vuelve a visitar este miércoles por primera vez como entrenador.

Como técnico su fortuna no ha mejorado. En su primer año, Zidane tomó las riendas de un equipo que ya estaba eliminado del torneo del KO tras la polémica alineación indebida de Denis Cheryshev ante el cargo que erosionó aún más la figura de Rafa Benítez antes de ser destituido. La pasada temporada, el galo también llegó al banquillo con la temporada empezada y el equipo ya había quedado eliminado a manos del Barcelona en las semifinales de la Copa del Rey.

En la 2016-2017, el Real Madrid parecía lanzado a por la Copa del Rey tras eliminar con solvencia a un rival duro como el Sevilla de Jorge Sampaoli en octavos de final pero sorprendentemente cayeron en cuartos ante el Celta, que ganó 1-2 en el Santiago Bernabéu y empató (2-2) en Balaídos. Un año después cayó en cuartos de final ante el Leganés después de ganar 0-1 en la ida pero caer por 1-2 en la vuelta en el Santiago Bernabéu.