La inesperada ayuda que cambia el futuro de un histórico | OneFootball

El Real Zaragoza contará con un refuerzo económico de 227.272,73 euros procedente de un programa de solidaridad impulsado por la UEFA. Este importe, idéntico para todos los clubes de Segunda División, forma parte del nuevo modelo de distribución que la confederación europea ha acordado para los equipos que, como el club aragonés, no participan en la Champions League, Europa League ni Conference League.

La ayuda se enmarca en un mecanismo de apoyo específico, dirigido tanto a entidades de Primera como de Segunda que disponen de un programa de desarrollo de cantera. La normativa determina que estos fondos deben destinarse exclusivamente al fomento y fortalecimiento de sus estructuras de formación. El objetivo principal es elevar tanto los estándares deportivos como organizativos de los clubes beneficiarios, consolidando el papel de la base en proyectos a medio y largo plazo.

A través de la Real Federación Española de Fútbol, se ha comunicado que, en el nuevo ciclo económico de la UEFA para clubes masculinos, el porcentaje de ingresos asignado a este fondo solidario ha pasado del 4% al 7%, alcanzando una cifra global anual de 308 millones de euros. El umbral, fijado sobre unos ingresos previstos de 4.400 millones de euros, permite aumentar el reparto para clubes no participantes hasta casi un 80% respecto a los 175 millones del periodo 2021-2024. Se trata del mayor incremento desde la implantación de estos pagos.

En el caso de la Segunda División, los 22 equipos reciben la misma cantidad, sin excepción: ni el ascenso ni el descenso afectan al montante. Así, clubes como Zaragoza, Tenerife, Eldense, Racing de Ferrol o Cartagena son destinatarios de esta inyección, independientemente de su situación en el cierre del curso. Por su parte, los clubes de la máxima categoría que no accedieron a competiciones UEFA reciben cerca de 384.000 euros.

Para el Zaragoza, este ingreso supone una ayuda para reforzar la estructura de cantera en un contexto de cierta incertidumbre deportiva e institucional. El club se ha visto obligado a buscar nuevas vías de financiación, como la comercialización de los derechos de nombre de su futuro estadio, mientras el primer equipo no ha logrado cumplir expectativas sobre el césped y encara un proceso de reconstrucción. En este escenario, cualquier apoyo dirigido al desarrollo de sus jóvenes representa una oportunidad para fortalecer la base del proyecto.

El sistema de solidaridad de la UEFA revalida así su apuesta por acompañar económicamente a los clubes que no tienen presencia internacional, pero que asumen el reto de captar, formar y proyectar nuevo talento. El empleo obligatorio de estos recursos en la base impulsa indirectamente la sostenibilidad y la competitividad, dos pilares clave en la estrategia de futuro de una entidad como el Real Zaragoza.

Source: El Periódico de Aragón