La decisión de Gudelj | OneFootball

“¿Qué es toda la vida mortal sino una especie de comedia donde unos aparecen en escena con las máscaras de los otros y representan su papel hasta que el director del coro les hace salir de las tablas?” (Erasmo de Róterdam)

Gudelj tuvo décimas de segundo para elegir entre seguir con el balón hacia la portería de Las Palmas e intentar marcar, solo se le interponía el portero sevillano del equipo canario; o no forzar la carrera después de notar el contacto en su tobillo izquierdo, caer y provocar la expulsión de Saúl Coco, dejando al equipo amarillo con diez jugadores y 87 minutos de partido por delante: eligió caer, acertó y nos mostró que este serbio es, además de un tipo muy honesto, un hombre muy inteligente. Cualquier analista táctico hubiese elegido finalmente esa opción, pero Gudelj tuvo que decidir en caliente, en carrera y en microsegundos.

A buen seguro que si a Quique Sánchez Flores le dan a elegir, hubiese hecho como Gudelj. Para el Plan de Rescate, según ha dicho el entrenador cuartelero del Sevilla, era mucho mejor jugar contra diez que cobrar ventaja temprana en el marcador. Al final, a Gudelj lo acaban queriendo todos los entrenadores, no solo por su entrega sino también porque es la voz táctica del míster dentro del campo. Fui muy injustamente pesimista con Quique Sánchez Flores el día de la derrota con el Celta, pero los resultados y esta elección de Gudelj lo redimen porque muestra que ha conseguido que el equipo interiorice el Plan de Rescate.

Cualquiera que sepa leer fútbol lo tenía claro: ahora tocaba plan de rescate y no modelo de plan de juego. Quique lo tenía diáfano. La duda era si sería capaz de convencer a un equipo facturado para los algodones de azúcar de la élite, de la necesidad del barro del rescate, pasar de jugones a bomberos. La elección de Gudelj indica que lo está consiguiendo; no era fácil el asunto. Esta ventaja tan tempranera era buena solo si, y solo si, el equipo no le comía la ansiedad y se tiraba alocadamente a por la victoria; si el equipo no volvía a los jugones y se olvidaba de los bomberos. Al Sevilla no le pudo la seductora impaciencia y los goles y las ocasiones fueron cayendo.

El rescate no está ni mucho menos completado, pero la hoja de ruta se está cubriendo. Quedan muchos puntos en disputa todavía. No podemos bajar la guardia contra nuestro peor enemigo, nuestros propios delirios de grandeza. El espejismo glamuroso de Europa, pretérito tan inmediato, no debe suplir a la realidad imperiosa de los polvos del albero actuales. Quique Sánchez Flores, el equipo, parece que lo saben. Esta es la paradoja: como sin olvidar las glorias de Europa, no eludimos la pesadilla desagradable actual. Erasmo de Róterdam, el Feyenoord es el actual campeón de la liga holandesa, escribió un ensayo llamado «Elogio de la locura», para defender las virtudes de la razón. Quique defiende el plan de rescate para que haya posibilidad de discutir sobre el modelo de plan de juego el año que viene. Erasmo nos enseña que en muchas ocasiones, especialmente en los momentos críticos de cambio, la verdad habita en el seno de la paradoja.