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Álvaro Cañete·1 de julio de 2023
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Álvaro Cañete·1 de julio de 2023
La atención de todos estaba enfocada en la selección inglesa, ya que Sarina Wiegman hizo varios cambios en ataque, optando por Rachel Daly y Lauren James en lugar de Alessia Russo y Chloe Kelly desde el principio del encuentro.
Sin embargo, el desempeño de Inglaterra en la primera mitad fue insulso. Les faltaba energía, posiblemente debido al prolongado descanso tras el final de la temporada de la Superliga Femenina (WSL), y se vieron forzados a realizar pases horizontales durante largos periodos debido a la sólida defensa portuguesa.
La inclusión de Russo en el terreno de juego tuvo un impacto notable, ya que se replegó estrategicamente para conectar con James, quien asumió el papel de número 10 y demostró ser más efectiva que Ella Toone en los primeros 45 minutos. Este resultado hace que Wiegman reflexione acerca de sus decisiones en cuanto a la alineación y el sistema de juego, especialmente ahora que el primer partido de Inglaterra en el Mundial se acerca rápidamente.