Iker Losada y su agitado asentamiento en primera división | OneFootball

Uno de los nombres que más pudo llamar la atención en el mercado de verano fue el de Iker Losada, un joven gallego de 23 años que tras una irrupción categórica en segunda división daba el salto al máximo escalón del fútbol español de la mano del Real Betis. El club verdiblanco le brindó confianza y lo asentó en los planes de Pellegrini, para el cual cada día cuenta más. El media punta ha participado en ocho de los trece partidos disputados en liga, sumado al de Copa del Rey ante el Gévora.

El canterano del Celta de Vigo llegó con la idea de impregnarse de una plantilla competitiva y de jugadores de mucho peso. Esos mismos jugadores que en gran medida son su gran competencia, como pueden ser Lo Celso, Fornals o el lesionado Isco, al mismo tiempo son los que están haciendo a Losada tener que adaptarse a nuevas posiciones con tal de buscar minutos.

Uno de los comodines de Pellegrini

En el último partido en el Villamarín ante el Celta, el dorsal 19 pudo jugar en el carril del diez, puesto habitual durante su pasado en el Racing de Ferrol. Dicho partido resultó de los pocos que disputó en su sitio, posición que como estamos viendo, puede variar según el contexto del partido. Disfrutó de toda la segunda parte en San Mamés jugando en una línea de cuatro cayendo al sector derecho. Tuvo breves minutos como banda izquierda ante el Atlético de Madrid sustituyendo a Abde y participando ante el Getafe nuevamente detrás del nueve.

Esta versatilidad en diferentes zonas del juego le convierten en una carta más que útil para Pellegrini, que cada vez se ve como cuenta más con un inexperto pero habilidoso Losada en la zona ofensiva. Sumado a estos registros en la zona de tres cuartos de campo, destaca por su labor defensiva dado que tiene un porcentaje de eficacia en duelos ganados, tanto terrestres como aéreos, del 50%.

La competencia de la media punta

Tal y como se pudo ver el pasado domingo, el técnico chileno volvió a optar por el sistema que le ha reinado en el Betis, un equipo con un único punta, comandado por un mediocentro ofensivo por detrás. Ante la inminente vuelta de Lo Celso, el de Catoira se va a ver en la obligación de reconvertirse a otras posiciones para poder optar con más minutos. Caso parecido al que se ve habitualmente con Fornals, o se vio en su día con Rodri.

Su rol en esta primera temporada parecía asimilarse al que pudo tener Altimira la temporada pasada. Una temporada de aclimatación a la liga y no tener tanta presencia, pensamiento erróneo debido a las múltiples oportunidades que tiene. Un jugador que despliega una calidad con el balón en los pies descomunal, mucha visión en área rival y muy participativo, pese a tener que seguir creciendo de la mano del Betis.

El gallego ya comentó en entrevistas pasadas que vive un sueño al estar rodeado de estrellas que idealiza y que en ningún momento dudó de recalar en las filas béticas. Hasta el momento vive su primera temporada oficial como jugador de primera división y contando cada vez más para el entrenador, sea en su posición o en cualquier faceta del campo.