Homenaje amargo | OneFootball

Llegaba el Sevilla con el agua al cuello, porque ha pasado en estos meses de ser la alternativa al título a jugarse la máxima competición en las últimas fechas. El Atleti preparaba el homenaje a Suárez y el Cholo le dio la titularidad y salió el equipo tratando de abastecerlo, de la forma esa en la que a comienzos del año pasado labró su leyenda en este club. Todos esperaban con ansias el gol del uruguayo, que pudo llegar en varias ocasiones, pero su punto de mira estuvo un poco descentrado, tal vez por la falta de uso en los últimos meses. Quien sí marcó, y también lo necesitaba, fue su paisano Giménez. Carrasco botó un córner que cabeceó perfecto en el minuto 30 para poner al Sevilla contra las cuerdas.

De ahí al final, sucedió una cosa poco novedosa en esta temporada. El rival, obligado por las circunstancias, aprovechó el pasito atrás y fue metiendo hombres de área. El Atleti necesitaba salir y matar el partido pero ni una cosa ni otra. En el sesenta Suárez recibió su ovación en vivo, pues aquello estaba para correr al espacio y ya sabemos que Lucho está para alojarse en el área sin salir de ahí. Entraron Cunha y Correa, Herrera, en el que sería también el último partido del mexicano en el Metropolitano.

El Sevilla se fue acercando por pura inercia, parecía cómodo defendiendo el Atleti hasta que empezaron a llegar los centros laterales. En-Nesyri avisó con un cabezazo al palo y en el ochenta, entrando desde segunda línea, remató perfecto un centro medido de Koundé. Le valía el punto a los de Lopetegui para afianzar la Champions y ya no se jugó más, todo el mundo se quedó a despedir a Suárez, a agradecerle, a mostrarle que no hace falta tanto tiempo para penetrar en el corazón de la gente. El uruguayo será una Leyenda en rojiblanco, en apenas una temporada sin gente y él se llevará al Atlético de Madrid dentro de sí. Un jugador legendario que parecía hecho a la medida de este club, a la medida de Simeone, que llegó demasiado tarde, pero lo justo para ayudarlo a salir campeón, como rezaba la pancarta que lo despidió.

Foto: atleticodemadrid.com