Hay que completar el vaso medio lleno | OneFootball

Con el cero a cero en la Bombonera, Independiente finalizó un 2024 que tiene dos caras de la misma verdad.

La famosa frase del vaso medio lleno, sirve como ejemplo de lo que decimos, pudiéndose quedar cada uno con la mitad que desee.

El equipo de Julio Vaccari no brilló, ni estuvo cerca de un gran nivel o algo que se le parezca. Eso es una realidad irrefutable, que nos lleva a varias discusiones.

Para que estaba y está este plantel es algo debatible, como también que tan conforme está cada hincha con lo realizado por el entrenador.

Pero más allá de lo que queramos decir acerca de los dibujos tácticos y lo ejecutado por los jugadores dentro del campo, hay otra verdad que no se puede negar.

Independiente mejoró su participación en la Liga, teniendo en cuenta los últimos años. Eso también lleva a más debate, como el nivel mostrado por el torneo local, con la mayoría de los equipos jugando de mediocre para abajo.

Pero los números son claros, e indican que el Rojo terminó este año octavo en la general, con 63 puntos, producto de 15 ganados, 18 empatados y 8 perdidos. Con +12 de diferencia de gol.

Yendo a los porcentajes, quedó con un promedio de 1.53, ganando el 51% de los puntos en juego.

Estas cifras son las mejores en lo que va de la década, siendo muy similares a las del 2021, y muy superiores a las de los últimos dos años.

Esto explica obviamente la clasificación a la Sudamericana tras dos años de ausencia, y son las mejores estadísticas de este gobierno.

En el 2021 también quedamos octavos con 58 unidades, también ganando el 51% de los puntos en juego, disputando 38 fechas.

Mientras que en el 2022 y 2023, finalizamos los dos con 51 unidades (el 42%), en el puesto 15 en 2022 y en el 19 al año siguiente.

En este momento estamos con 1.34 de promedio en el puesto 12, mientras que arrancamos el 2025 dos escalones más arriba, con 1.39.

Es lógico pensar que la mejora en la cosecha está directamente relacionada con los aciertos en el mercado de pases pasado, lo que llevaría a creer que por ejemplo con Carlos Tévez todo el año, la cosecha hubiese sido la misma. Siguiendo el pensamiento, a partir del 2020 los planteles fueron empeorando receso tras receso, y eso se vio reflejado en los resultados. Mientras que con los arribos de Lomónaco, Loyola, Montiel y Vera, se mejoró el plantel del primer semestre, y por eso terminamos así en este momento.

A partir de ahí comienzan los debates sobre la calidad de los técnicos, y cuanto pueden hacer con estos dirigentes y el plantel actual.

Podemos discutir muchísimo, siempre y cuando sea de manera constructiva, en pos de lo más importante, que es el club.

En definitiva, podemos arribar a la siguiente conclusión. Este año termina siendo positivo teniendo en cuenta los anteriores, y debe ser el piso a partir de ahora. Y esto no es un simple deseo de hincha, es lo que debe ocurrir teniendo en cuenta la calidad del plantel actual, que no debe bajar el año próximo.

Eso depende de los dirigentes, que empiezan a jugar su partido. Tras varias derrotas, en el último mercado ganaron. Ojalá vuelva a pasar, lo necesitamos para que el techo del plantel esté más cerca de nuestra historia más gloriosa.