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·1 de mayo de 2020
Fútbol Histórico: La UEFA Champions League de 2004

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Esta edición representó una gran evolución respecto a las anteriores por su formato: se eliminó la segunda fase de grupos por una novedosa ronda de octavos, que se decidiría a sorteo, enfrentando a los primeros y segundos de grupo. Además, aumentaron las plazas de los equipos, disputando el torneo en total (incluyendo previas) 72 equipos.
La fase de grupos tuvo un total de 48 partidos, que sirvieron para conformar los octavos de final que, en un formato de ida y vuelta, iban a servir para decidir a los ocho mejores equipos de Europa. Uno de esos ocho equipos iba a levantar la Champions ante la mirada del Arena AufSchalke (actual Veltins-Arena).
El Porto era el primer clasificado a los cuartos de final, superando en la eliminatoria al Manchester United de Sir Alex Ferguson. El Mónaco había superado, en el otro lado de la tabla, al Lokomotiv de Moscú.
La Real Sociedad había caído con el Olympique de Lyon y el Celta de Vigo con el Arsenal. El Deportivo de la Coruña había vencido a la Juventus y el Real Madrid se había impuesto en la eliminatoria frente al Bayern de Múnich.
En los cuartos de final, el Porto vencía en la eliminatoria al Olympique de Lyon, en un abultado 4-2. Los portugueses habían ganado en casa para empatar en la vuelta, que se jugó en Francia.
En la segunda eliminatoria de cuartos, el Milán intentó garantizar su pase en el partido de ida, jugando en casa. Se impusieron frente al conjunto gallego en un 4-1 que reflejaba lo ocurrido en el campo. En el partido de vuelta, en Riazor, el conjunto local hizo historia goleando a los vigentes campeones de la competición.
La tercera eliminatoria enfrentaba al Real Madrid, que superaba con un 4-2 al Mónaco de Fernando Morientes. En la vuelta, el conjunto del principado pudo aprovechar el factor local para llevarse el partido y el global, con un 3-1 que, sumando los dos goles que anotaron en el partido de ida, daba el pase a los franceses.
En la última eliminatoria, tras un empate en Stamford Bridge, el Chelsea conseguía llevarse la eliminatoria como visitantes, en Highbury. El Arsenal veía a sus máximos rivales lograr el pase a las semifinales en su propia casa, frente a todos sus aficionados.
Las semifinales eran la última ronda a doble partido, porque la final se jugaba a partido único. A esta instancia habían llegado el Mónaco, el Porto, el Deportivo de la Coruña y el Chelsea.
El primer partido se jugaba en Portugal, entre el Porto y el Deportivo de la Coruña. Fue un encuentro complicado para los visitantes, que se fueron con la eliminatoria abierta tras un 0-0 muy bien defendido por el Porto. En el partido de vuelta, en Riazor, el conjunto portugués se impuso en un 0-1 que garantizaba su pase a la final de la UEFA Champions League.
En la segunda semifinal, el Mónaco y el Chelsea se jugaban disputar la final frente al Porto. El partido de ida se jugó en Mónaco, y en este el conjunto del principado ganaba 3-1. El club de Deschamps, se veía obligado a mantener el resultado positivo en el partido de vuelta. Allí, en Inglaterra, lograba firmar un empate a 2, que daba el pase a la final a los suyos.
La final se realizó en Alemania, acogiendo a dos finalistas que habían sido las dos revelaciones del torneo, bajo el mando de dos técnicos con estilos característicos a la par que efectivos. José Mourinho había confeccionado una plantilla que se amoldaba a su juego y, había supuesto una revolución a nivel táctico en su país. Mientras, quien fuera capitán de la selección francesa que ganó el mundial, Didier Deschamps, había tenido un estilo diferente, confiando en sus jugadores y apostando por el talento, que también había resultado efectivo, superando a grandes clubes como el Real Madrid o el Chelsea.
Los portugueses salían al campo con un 4-3-3 en la pizarra, en el que destacaban nombres como el de Ricardo Carvalho en el eje de la zaga, Maniche en el centro del campo o Deco partiendo desde banda, pero con libertad total. Los franceses también comenzaban con un 4-3-3 en la pizarra, aunque estos con jugadores de características más ofensivas, como Patrice Evra, Ludovic Giuly en banda o Fernando Morientes coronando el ataque.
En el minuto 39′, Carlos Alberto, delantero del Porto, ponía el 1-0 en el marcador, en el primer remate a puerta del partido. Esto hizo que el conjunto de Deschamps saliese al ataque, dejando espacios que aprovechó muy bien el Porto que, bajo las botas de Deco, puso el 2-0 en el marcador. En el minuto 75′, Dmitri Alenichev ponía el 3-0 en el cartel luminoso, para confirmar la victoria de los portugueses.
Al señalar el final Kim Milton Nielsen, árbitro aquel día, los jugadores del Porto junto a su técnico, se lanzaban al campo para celebrar el título. Habían logrado un hito histórico, ganar en la Champions League de las sorpresas, en la que habían triunfado los equipos “matagigantes”.
José Mourinho firmaba aquel verano por el Chelsea, mientras que varios jugadores también se marchaban a otros clubes, como Deco al FC Barcelona. Aquel Porto caía, víctima de uno potencial económico inferior al de los grandes europeos, que ni siquiera la máxima competición de clubes pudo aumentar.