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·8 de abril de 2021
Fútbol Histórico: George Best, el quinto Beatle

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George Best nació el 22 de mayo de 1946 en Belfast. A lo largo de su carrera deportiva, pudo ser uno de los mejores jugadores de la historia. Sin embargo, las mujeres y el alcohol apagaron a esta estrella con el paso del tiempo. Con 17 años, debutó en el Manchester United y formó uno de los mejores tridentes de la historia, es decir, la Santísima Trinidad. Además, consiguió ganar una Copa de Europa y llevarse en una ocasión el Balón de Oro.
Durante su infancia, el joven Best nació y se crió en Cregagh, es decir, Belfast. Era un niño que se le daba bien estudiar y pese a ser tímido, le gustaba jugar a fútbol en sus tiempos libres por las calles. En una ocasión, el por aquel entonces ojeador del Manchester United quedó impresionado al ver la calidad que demostraba George Best. Tras observarlo con detalle, anunció al club inglés que había encontrado a una futura estrella.
Con la joven edad de 15 años, Best entró en la cantera del Manchester United donde pudo dar sus primeros pasos como futbolista. Además de ello, comenzó a desarrollar sus cualidades hasta el año 1993, cuando le llegó la hora de dar paso al primer equipo. A los 17 años, pudo debutar con los Reds en la liga inglesa y pudo consolidarse en el equipo al final de la temporada.
Tras 8 años de sequía, el Manchester United pudo volver a ser campeón de la liga inglesa con un George Best ya consolidado titular indiscutible. Junto a él, estaban Denis Law y Bobby Charlton para formar el tridente de la Santísima Trinidad. Ocupaba la posición de extremo derecho y una de sus cualidades era su forma de encarar y quitarse rivales de su camino. Además, tenía una gran arrancada con y sin balón y realizaba los cambios de juego de una forma magnífica.
Debido a su gran juego, comenzó a levantar pasiones tanto en Old Trafford como en el Reino Unido. En el año 1966, fue el año en el que George Best se confirmó como una de las estrellas del momento. Con la edad de 19 años, fue protagonista de una gran noche en la que los ingleses golearon por 1-5 al Benfica con dos goles del extremo derecho.
En el año 1968, llegaría el premio de la primera Copa de Europa para el Manchester United. En las semifinales del torneo, eliminaron al Real Madrid para alcanzar la final de Wembley. Y en aquella final, tanto los reds como Best se enfrentarían al Benfica de Eusebio. Al final de los 90 minutos, el choque finalizó con 1-1 en el marcador pero sin embargo, se decidió en la prórroga con un tanto de la estrella de Belfast.
Finalmente, los ingleses vencieron por 1-4 e hicieron historia al ser el primer equipo inglés en levantar la Copa de Europa. En ese mismo año, el propio George Best fue reconocido como el mejor jugador de Europa para entregarle su primer Balón de Oro.
Tras el éxito en la Copa de Europa, tanto el equipo como los jugadores disminuyeron el ritmo con una alta claridad. En la liga inglesa, finalizaron en el puesto 11 de la clasificación. Por su parte, perdieron la final de la Copa Intercontinental ante Estudiantes de la Plata por 0-1 y cayeron en semifinales de la Copa de Europa frente al AC Milan.
Al siguiente curso, los Red Devils no mejoraron su rendimiento. Sin embargo, George Best fue el máximo goleador del equipo con 23 dianas. Tras esto, comenzaría el descenso de nivel del chico de Belfast.
Para un jugador como lo era Best, los resultados no eran los esperados y comenzó a encontrar otras distracciones fuera del mundo del fútbol. El alcohol y las salidas nocturnas comenzaron a ser costumbre en la vida del jugador. Además de ello, debido a su aspecto, lo apodaron como el Quinto Beatle y fue el primer jugador que comenzó a sacar beneficios de su derechos de imagen.
En el año 1970, Matt Busby regresó al Manchester United para hacerse cargo del equipo. Desde el comienzo, tuvo dos grandes retos. Por una parte, quería devolver a los Red Devils a la élite del fútbol y por otra parte, buscaba encaminar la vida de Best. Sin embargo, no consiguió ninguno de los dos retos ya que el club no conseguía obtener buenos resultados y el jugador era más desobediente.
En el año 1971, fue sancionado durante dos semanas al no querer viajar con el club de manera voluntaria. Por aquel entonces, tenía otros planes como pasar el fin de semana en casa de una famosa actriz. En la temporada 1972-73, volvió a realizar grandes actuaciones pero sin embargo, seguía mostrando más indisciplina con el paso del tiempo. Pese a ello, fue el máximo goleador de su equipo al anotar 27 goles.
En 1972, anunció su retirada del fútbol con 26 años al no ver al fútbol como lo veía antes. Sin embargo, se arrepintió de esto y acudió a la pretemporada con el Manchester United. Debido a los malos resultados, comenzó a desmotivarse de nuevo y se mantuvo ausente en el mes de diciembre para acudir a fiestas en Londres. Tras una sanción del club, volvió a anunciar su retirada, pero acabó jugando una temporada más.
Tras no presentarse de nuevo a los entrenamientos, se le fue suspendido durante dos semanas de empleo y sueldo. Además de ello, la entidad inglesa lo añadió en la lista de jugadores transferibles en el mercado. Aquel año fue desastroso para los Reds Devils ya que acabaron descendiendo a Segunda División por el famoso tanto de Denis Law. Durante las 14 temporadas de Best, disputó un total de 474 encuentros en los que anotó 181 goles.
Con al pronta edad de 26 años, la carrera del chico de Belfast comenzó su declive total. Además, tras su mala salida del Manchester United, puso rumbo a Suráfrica, donde no jugaría demasiado tras faltar a varios entrenamientos. Con ello, puso rumbo a Estados Unidos.
Antes de ello, jugaría en algunos de los equipos más modestos del país inglés y después, a la liga irlandesa donde tampoco estuvo mucho tiempo. En el año 1976, comenzó su aventura en Estados Unidos donde pudo coincidir con varias estrellas como Franz Beckenbauer, Pelé o Johan Cruyff. A la vez que jugaba al fútbol, podía salir tranquilamente por la noche al no ser tan conocido.
Recuperó la sonrisa al año siguiente tras fichar por el Fulham. Allí, defendió la camiseta del conjunto inglés durante un año y medio y después, volvió a Los Ángeles. Tras un tiempo en el país estadounidense, fichó por el Hibernian. El club escocés pudo salvarse del descenso y además, Best salvó al club de la ruina al realizar grandes ventas de taquillas. Sin embargo, los escoceses acabaron descendiendo de categoría.
De nuevo, volvió a Estados Unidos para jugar en la NASL. Tras volver a los hábitos de faltar a los entrenamientos, acabó abandonando el país estadounidense. Tras ello, ficho por el Bournemouth y se retiraría en un club de su país para cumplir con su sueño de vestir la camiseta de un club de su origen natal. Con la edad de 38, pondría fin a su carrera deportiva.
Además de despedirse del fútbol de élite cuando aún era joven, Best acusó no jugar con una selección de nombre. Con 17 años, debutó con la selección de Irlanda del Norte. Durante toda su trayectoria como internacional, disputó un total de 37 partidos en los que anotó 9 goles.
Nunca acudió con su selección a una gran cita futbolística. En el año 1982, Irlanda del Norte se clasificó para el Mundial de 1982. Best se propuso ir pero su mal estado de forma y su edad le impidieron participar.
En el año 2000, los problemas con el alcohol aumentaron de una forma muy preocupante. Fue intervenido por un trasplante de hígado. Además de ello, fue condenado por conducir borracho.
Al seguir viviendo, en el año 2005, comenzó a agonizar. Antes de morir aconsejó a todos los jóvenes que no murieran como él. El 25 de noviembre de 2005, la figura de George Best decía adiós a la edad de 59 años. Junto a él, se marchaba un jugador que durante algunos años, fue el mejor jugador sobre los terrenos de juego.
A lo largo de su carrera deportiva, George Best pudo levantar un total de 6 trofeos. Todos ellos fueron con el Manchester United y ganó una Copa de Europa, 2 ligas inglesas, 2 Charity Shield y una Copa FA Juvenil