Fútbol Histórico: El día que el Wigan gano la FA Cup | OneFootball

El año 2013 la final de la FA Cup enfrentó a dos equipos muy dispares; al Manchester City, recién empezado su era más victoriosa, y al Wigan Athletic, jugándose el descenso, haciéndolo realidad finalmente

El contexto de la final era algo peculiar, el Manchester City, a falta de dos jornadas de liga, matemáticamente quedaba segundo en liga. Mientras tanto el Wigan Athletic se disputaba el descenso directo a Championship, pero aun así, veían con mucha ilusión jugar la final de la FA Cup. Más que nada por el rival que era.

En lo que a las plantillas se refiere, el City salió como claro favorito ya que este mismo once, a excepción de Lescott, había ganado la liga un año antes. Incluso, el entrenador no había variado, y es por esto por lo que no cabía lugar a duda de quién iba a ganar la final.

Pero enfrente estaba un Wigan Athletic que se encontraba en la decimoctava plaza, pero con un entrenador que más tarde sería muy conocido. Este es el actual seleccionador de la selección belga, Roberto Martínez. Aunque su plantilla no contaba con demasiados grandes jugadores. Salvo el portero actual del Betis, Joel Robles, ningún otro tuvo una carrera medianamente exitosa.

Primera parte: Gran igualdad, pero ningún acierto

Pese a la igualdad, los de Mancini salieron algo mejor que los de Roberto Martínez. La primera ocasión de peligro fue una falta al borde del área para los citizens, que no aprovecharon. Minutos después, el peligro lo creó el Wigan: un gran pase de Arouna Koné dejaba a su compañero Callum McManaman frente al portero.

El disparo del delantero inglés no encontró portería y la ocasión para adelantarse en el marcador se perdió. Llegada la media hora de partido, Carlos Tévez tuvo la ocasión más clara del partido, un disparo casi desde el suelo con la punta de los pies. Pero Joel Robles, irónicamente, también desde el suelo y con los pies despejó el balón.

Un ‘penalti’ no pitado

Al poco rato, Roger Espinoza simuló un derribe de Pablo Zabaleta en el área pero Andre Marriner no pitó nada. No iba a rendirse el Wigan ya que, minutos después, elaboraría una gran contra para otra jugada personal de McManaman. Tras regatear a portero y defensas, consiguió abrirse hueco para el disparo pero el balón fue desviado por Zabaleta.

La última ocasión de la primera parte fue para Samir Nasri. Este dribló a varios jugadores Latics para luego disparar desde fuera del área, pero ahí estaba Joel muy atento para despejar, otra vez, una clara ocasión de los SkyBlue. Dando lugar segundos después al pitido del descanso.

Segunda parte: la sobriez que llevó a la gloria

En la segunda parte, fue una vez más el Manchester City quien comenzó atacando la portería rival. Esta vez con un gran remate de Agüero desviado a córner por Boyce.

Las contras muy bien organizadas por los de Roberto Martínez comenzaron a incidir en forma de tarjetas para los citizens: Pablo Zabaleta y Nastasic fueron amonestados en el 60 y en el 75. El lateral argentino volvería a ver la cartulina por derribar por enésima vez a McManaman. Así pues dejaría a su equipo con uno menos a falta de seis minutos del final.

Finalmente, llegado el descuento, un córner botado por Maloney fue cabeceado al primer palo por Ben Watson para marcar el único y definitivo gol de la final. Watson fue la única sustitución que realizó el técnico español, por lo que el gol del inglés supuso una locura tanto en las gradas como en el banquillo.

La gran celebración tras vencer a Goliat

Nada más escuchar el pitido final, la celebración de los vencedores fue apoteósica y merecida. De esta manera David volvió a vencer a Goliat. Asimismo, el trofeo a Mejor Jugador del Partido fue para Callum McManaman, que pese a pecar algo de egoísmo, ayudó en gran parte a su club. Aunque cabe destacar el papelazo de Joel, que sin sus grandes paradas, el resultado pudo ser muy distinto.

Una temporada con nuevos míster

Tras el hito del Wigan Athletic de ganar la FA Cup, este tuvo el honor de clasificarse para la Europa League estando en Championship, aunque quedaron últimos en fase de grupos. Además, el resultado propició la marcha de Mancini, que se fue para dejar sitio a un nuevo proyecto con Manuel Pellegrini. Y en los vencedores, Roberto Martínez fichó por el Everton, dando un gran salto en su carrera.

La siguiente temporada estuvo a punto de repetir que el Wigan llegase a la final, pero fue eliminado por el Arsenal en semis en los penaltis. De este mismo modo perdieron la final de la FA Community Shield contra el Manchester United en la última temporada de Ferguson con los Red Devils.

Revanchas tras la final

Y hablando de repeticiones de este partido, nos encontramos que esa misma temporada, el Wigan, los vigentes ganadores de la FA Cup, fueron víctimas de un vengativo 0-5 en favor del City en primera ronda de la EFL Cup. Tras este último solamente se han disputado dos partidos, todos de FA Cup. Aunque en estos fueron los ganadores de la final quienes volvieron a vencer a los citizens, 1-2 y 1-0.