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·8 de octubre de 2024
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·8 de octubre de 2024
Fue una reacción que dividió a los aficionados del conjunto azulgrana tras la victoria del Barcelona por 3-0 ante el Alavés. Los blaugrana vieron cómo la salida de Lamine Yamal del terreno de juego antes del final del partido le causó un gran enfado.
De nada sirvió intentar hablar con Lamine Yamal cuando abandonó el terreno de juego contra el Deportivo Alavés (0-3). El joven de 17 años no ocultó su enfado a su entrenador, a su cuerpo técnico ni a sus compañeros. El internacional español dio un manotazo de frustración a todo el mundo antes de quedarse cabizbajo en su asiento.
Yamal se quedó mirando al vacío, incapaz de ser calmado por el personal del FC Barcelona. Nadie sabe si estaba triste por su regreso al banquillo en el minuto 67 o por la calidad de su juego. Sin ser horrible, el prodigioso zurdo no fue decisivo.
Entre los aficionados azulgranas, esta reacción divide. Algunos lo ven como un acto de un jugador con una personalidad con una determinación inquebrantable de hacerse indispensable. Quiere participar plenamente en cada partido y rendir al más alto nivel.Otros se preguntan por su mentalidad, sobre todo teniendo en cuenta que su equipo iba muy por delante y que el Yamal, de sólo 17 años, está en racha últimamente. Además, Ansu Fati, aquejado de una serie de problemas, ha podido recuperar el ritmo.La respuesta está probablemente en algún punto intermedio, y su corta edad conduce inevitablemente a algunos «arrebatos» inoportunos. Mejor no echárselo en cara.