Diario Área Técnica
·3 de marzo de 2022
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El Everton se ha impuesto por 2-0 frente al Boreham Wood, en Goodison Park, por los octavos de final de la FA Cup. En un encuentro donde los de Frank Lampard dominaron de principio a fin contra un rival, el cual individualmente era manifiestamente inferior, que opuso toda la resistencia posible.
Los Toffees terminarían chocando con sus carencias y un rival sin complejos
El choque empezó con un evidente dominio del Everton, que pese a saltar al terreno de juego con una cierta relajación -por su teórica superioridad sobre su rival de quinta división- no tardaría en adueñarse del esférico y ejercer un palpable dominio territorial, que sometería a un oponente que se agolpó entorno a su área y trató de contener a la bandada Toffee dentro de sus posibilidades. Impulsado desde los carriles por Mykolenko y Patterson, el equipo de Lampard aumentaría exponencialmente la velocidad a la que circulaba el esférico, al poder profundizar por los costados gracias al uno contra uno que los visitantes planteaban entre carrileros. Fruto de ello, la balanza de las ocasiones se decantaría ligeramente del lado local, el cual exploraría el foco que hallaría en el perfil derecho, fomentado también por la tendencia de Rondón a perfilarse hacia ese lado. Como resultado de la movilidad del atacante venezolano, se desencadenarían las escasas ocasiones que se producirían en los primeros 25 minutos del primer período, en forma de poderosos lanzamientos desde una posición escorada en el costado diestro, frente a los que el arquero contrario se vio obligado a intervenir.
En el último cuarto de hora de juego, el Everton seguiría siendo protagonista en el juego manteniendo la posesión de la pelota, contra un adversario cuyo plan ofensivo residía en profundizar al máximo por las bandas, alimentado por las llegadas desde segunda línea que terminaban apurando línea de fondo, para servir un centro al área que tantease una opción de remate en el segundo palo. Con el paso de los minutos, los scousers consiguieron estabilizar los impulsos de su rival con una mayor intensidad -que decantó las pugnas aéreas y los balones divididos de su lado- y abocó a los dirigidos por Luke Garrard a organizarse nuevamente entorno a su área en un 1-5-4-1, en el que Ricketts -en la medular- y Smith -en banda derecha- poseían el rol de marcadores. El primer período llegaría a su fin con la acción concentrada en la mitad de campo del Boreham y con un conjunto de Liverpool que dominaba superficialmente, pero no generaba situaciones de peligro -más allá de algún lanzamiento aislado de media distancia-.
LIVERPOOL, ENGLAND – MARCH 03: Anthony Gordon of Everton shoots on target while challenged by Kane Smith of Boreham Wood during the Emirates FA Cup Fifth Round match between Everton and Boreham Wood at Goodison Park on March 03, 2022 in Liverpool, England. (Photo by Stu Forster/Getty Images)
La entrada de Richarlison revitalizó a los locales
El segundo período se inició con una gran declaración de intenciones por parte de Frank Lampard, al sustituir a uno de sus carrileros -Patterson- para dar entrada a Richarlison. A raíz de la entrada del brasileño en el campo, los anfitriones no mejoraron sustancialmente el juego que desplegaron, aunque sí que se estaban mostrando más verticales y dinámicos en cada aproximación, a pesar de que finalizarían sus acciones con una evidente precipitación. Sin embargo, Rondón lograría abrir el marcador anotando un gol muy propio de un delantero centro, al anticiparse -en el primer palo- a un centro raso de Kenny desde la derecha. Tras el 1-0, el Everton aumentó su agresividad después de una pérdida, en perfecta consonancia con un contrincante que había abandonado el repliegue de los primeros 45 minutos. Como resultado de ello, los Toffees lograrían aproximarse a la meta defendida por Ashby-Hammond con mayor facilidad incidiendo por los costados con Richarlison y Gordon.
En el último cuarto de hora de juego, los dirigidos por Frank Lampard ofrecerían un gran despliegue físico y seguirían buscando la meta rival con insistencia, aglomerando una gran cantidad de efectivos en el último cuarto de campo, y conectando remates sobre la meta del Boreham con gran facilidad desequilibrando por el perfil izquierdo. A cinco minutos para el final, Salomón Rondón consiguió ratificar el triunfo del Everton, después de rematar de cabeza en el segundo palo, un centro medido de Townsend, cuya actuación estaba siendo discreta, que superó la línea de gol, pese a los intentos del arquero visitante por sacar la pelota desde dentro de la portería. A tenor del 2-0, los de Liverpool siguieron llevando la iniciativa en el juego hasta el último instante, mientras que el técnico local aprovechaba la coyuntura para darles descanso a jugadores habituales como Gordon, Allan y Michael Keane.
Ficha Técnica
-Everton: Begovic- Kenny, Keane, Branthwaite- Patterson, Allan, Doucouré, Mykolenko- Townsend, Gordon- Rondón.
-Boreham Wood: Ashby-Hammond- Stevens, Stephens, Evans- Smith, Raymond, Ricketts, Mendy- Rees, Boden- Marsch.