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·19 de octubre de 2024
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Ollie Watkins anotó su quinto gol de la campaña en la Premier League cuando el Aston Villa hizo su mejor comienzo de temporada después de ocho partidos desde 1998-99 con la victoria sobre el Fulham.
Fulham tomó la delantera cuando un despeje largo de Bernd Leno fue perseguido por Raúl Jiménez y ganó una pelea con el último hombre Pau Torres antes de disparar con la zurda rasante a la esquina de la red.
Villa recuperó el nivel cuatro minutos más tarde, cuando un disparo de 20 yardas de Morgan Rogers se desvió con fuerza en Calvin Bassey y Leno con el pie equivocado.
Fulham recibió un penalti poco antes de la media hora después de que se considerara que Matty Cash había bloqueado un cabezazo de Jiménez que cruzó la portería, pero el manso esfuerzo raso de Andreas Pereira fue detenido por Emiliano Martínez.
Villa tomó la iniciativa a la hora cuando el delantero inglés Watkins se despegó de Emile Smith Rowe y cabeceó con fuerza en un córner de Youri Tielemans.
La tarde del Fulham a partir de ese momento fue de mal en peor cuando el defensa Joachim Andersen fue expulsado por arrastrar a Watkins antes de que Issa Diop desviara torpemente un centro raso de Lucas Digne hacia su propia portería.
La única nota amarga para Villa fue la expulsión del suplente Jaden Philogene, quien fue expulsado por una segunda tarjeta amarilla luego de cometer una falta sobre Reiss Nelson en el tiempo de descuento.
La victoria de Villa los elevó al cuarto lugar en la tabla y el Fulham permanece en el noveno lugar.
El penalti de Pereira tenía todas las características de un fallo clásico: sol en los ojos, carrera tartamudeante exagerada, pausa antes de golpear el balón y un remate débil empañado por la indecisión.
Antes del partido, el brasileño había realizado más pases en el área penal que cualquier otro jugador de la Premier League.
Presumiblemente, su intento de pasar el balón a la red desde 12 yardas después de que Fulham recibiera un penalti no cuenta para ese recuento.
Sin embargo, algo de crédito debería ser para Martínez. El guardameta argentino campeón del mundo abandonó su clavado lo más tarde posible y no dejó ningún intento de darle ‘los ojos’.
Martínez fue uno del contingente extranjero de Villa que no pasó las últimas semanas en servicio internacional, suspendido por dos partidos por la FIFA por comportamiento ofensivo durante las eliminatorias para la Copa del Mundo en septiembre.
Sin duda, el jugador de 32 años habría pasado la semana en el campo de entrenamiento de Bodymoor Heath de Villa estudiando los penaltis de Pereira para tal escenario y la tarea valió la pena.
Martínez, el siempre villano de la pantomima, inevitablemente aprovechó el momento: besó la insignia de Villa en su camiseta de portero y gesticuló ante la multitud de Craven Cottage.
El fallo obstaculizó el comienzo del Fulham y le dio impulso al equipo de Unai Emery antes de que Watkins se abalanzara con un gol arquetípico de cazador furtivo, rematando de cabeza más allá de Leno después de un movimiento inteligente en la esquina del área pequeña.
El Villa ahora está invicto en sus primeros cuatro partidos de liga fuera de casa por primera vez desde 2006-07. Dado que algunos de sus jugadores lesionados de larga duración también están volviendo a estar en forma, parecen una fuerza a tener en cuenta.
El Fulham paga la sanción pese a la buena racha de Jiménez
Jiménez ahora tiene 10 goles en sus últimos 12 partidos como titular en la Premier League, incluidos siete en sus últimos siete en Craven Cottage.
El camino del delantero mexicano para volver a alcanzar este tipo de números goleadores ha sido largo.
Sufrió una fractura de cráneo mientras jugaba para los Wolves en 2020, lo que amenazó con descarrilar su carrera.
En un momento dado, soportó una sequía de goles de 33 partidos, que terminó con el gol de consolación en una derrota en casa por 3-1 ante Villa la temporada pasada.
La única sorpresa en este partido fue que, dados los renovados niveles de confianza de Jiménez de cara a la portería, no ha sido trasladado a la función de lanzar penales.
Hace unas semanas, en la victoria del Fulham por 1-0 sobre el Nottingham Forest, el delantero de 33 años tuvo un cara a cara con el habitual Pereira.
En aquella ocasión Jiménez le quitó el balón a Pereira y posteriormente enterró el penalti.
Le valió una palmada en las muñecas por parte del técnico del Fulham, Marco Silva, y le pidieron que se disculpara con Pereira.
Después de un fallo tan importante, del que Fulham nunca se recuperó en este partido, Silva seguramente considerará el cambio.