Estos fueron los mejores momentos en la carrera de Jesús Molina | OneFootball

El futbol mexicano ha despedido este día a Jesús Molina como futbolista profesional. El mediocampista, cuyo último club fue Pumas, tuvo una gran carrera y aquí repasamos algunos de sus mejores momentos.

Nacido en Hermosillo, Sonora, su debut le llegó a los 19 años de la mano de Américo Rubén Gallego con la camiseta de Tigres. “Chuy” tuvo su primera aparición en el máximo circuito, en 2007, en un duelo ante Veracruz, en donde los felinos cayeron por la mínima diferencia.

Molina siempre se destacó como un hombre de constancia y fue esa misma la que, a dos años de su primera aparición en primera división, lo llevase a conseguir su primer gol, el 9 de mayo de 2009, en el empate entre Tigres y Morelia.

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Jesús Molina es de esos elementos que puede, sin problema alguno, presumir su recorrido por las canchas, no solo por los trofeos que ganó, que fueron varios, sino por las camisetas que portó. Además de Tigres, “Chuy” se vistió con los colores de América, Santos, Monterrey, Chivas y Pumas, equipos que, sin lugar a duda, son de los más importantes en el circuito mexicano.

Apenas 3 años después de su debut en primera división, a Molina le llegó la recompensa a su trabajo. En 2010, Javier Aguirre le dio su primer llamado a selección mayor en el duelo ante Corea del Norte, disputado en Torreón. De ahí, le llegaron convocatorias importantes como la Confederaciones de 2013, la Copa América Centenario de 2016 y fue tomado en cuenta en la Copa Oro de 2017. Para su mala fortuna, con el Tri no ganó nada y nunca fue considerado para un Mundial.

Fue tres veces campeón de Liga MX, dos con América y una con Santos; además, con los de Torreón logró un campeón de campeones y con Rayados se alzó con una Copa MX. A nivel internacional, Molina fue campeón con Tigres de la Superliga Norteamericana, en 2009, y de la Liga de Campeones de CONCACAF con los azulcremas, en 2015.

Molina cerró su carrera sin minutos en este Clausura 2024, esto, derivado de lesiones que mermaron su rendimiento, sin embargo, logró acumular 323 partidos oficiales, sumando 20 goles como profesional, siendo su mejor torneo en números, el Bicentenario 2010, en donde marcó 6 dianas en 13 partidos.

Con estas cifras y momentos, dice adiós Jesús Molina, un hombre que ya podría consagrase como un elemento histórico de la Liga MX.