POSTA DEPORTES
·28 de septiembre de 2023
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La lucha libre es un mundo de pasión, diversión y sobre todo de colección, ya que desde la época dorada del deporte-espectáculo hasta nuestros días, la máscara de un luchador es buscada por la afición, que llega a pagar costos elevados para hacerse de una pieza única de museo.
Tal es el caso de Esfinge, luchador del Consejo Mundial de Lucha Libre, que pudo vender la máscara que utilizó en el 90 Aniversario del CMLL, en donde por si fuera poco se quedó con la Copa Independencia al vencer a Rugido. No es la primera ocasión que uno de sus “tesoros” es adquirido por un aficionado, por un coleccionador, pero sí ha sido, quizá la más especial.
Esfinge compartió a Posta Deportes que rompió su récord personal en cuanto al costo más elevado en la que ha vendido su máscara.
“La (máscara) más cara del momento es la del aniversario, la compró una persona que ya había adquirido una máscara con este servidor, justamente en 2022”, comentó el carismático luchador con el relato.
“Me dijo: ‘Ya vi que vas a estar en las eliminatorias de la copa independencia, si estás en la final de la primera eliminatoria por ende estás en el aniversario’; yo le dije que estaba a sus órdenes y me contestó: ‘te resumo rápido no quiero quitarte tu tiempo, yo quiero la máscara del 90 Aniversario si tú resultas ganador, me dices cuánto va a salir porque esa máscara la quiero en mis manos’”.
Esfinge señaló que después de las eliminatorias ya en plena función de aniversario del CMLL, entró al vestuario y tomó su celular. El hombre interesado en su máscara no desistía del intento de quedarse con ella al final de la función: “Felicidades, campeón sigo en lo dicho quiero tu máscara”.
Esfinge, quien porta una de las máscaras más llamativas del CMLL, rompió su récord en cuanto al precio de venta, alcanzando un precio cercano a los 10 mil pesos.
“Esa máscara yo la vendí en 9 mil 500, fue el precio en el que se la di a ese amigo y te voy a ser sincero, dije si no me la compran se queda para el recuerdo en el museo de Esfinge. También yo voy a ser sincero, no es que no ame la lucha libre, pero con esa cantidad puedes hacer realmente muchas cosas, entonces me dijo, ‘sin problema alguno’, no me dijo que ni más barato ni más caro. Yo le dije al amigo acabando de luchar te veo en tal lado, te la firmo y así fue como cuadramos, yo agarré el dinero, no lo conté y ya estando desalojado de la arena, agarro el dinero, lo cuento y era el exacto”, explicó.
Pero más allá del costo de una máscara o de la atención con la afición, Esfinge señaló que sí molesta cuando alguien quiere vender una máscara como si fuera del luchador, cuando en realidad la adquirieron por otro lado.
“Quien es coleccionista tiene un gusto caro en toda la extensión de la palabra. Hay un tema que si quiero aclarar a la gente, yo realmente no soy un luchador que no firma máscaras. Una de las más económicas que venden afuera de la arena, una máscara que pudiste hacer en tu casa; pero una de las cosas que a mí no se me hace correcto, es que vendan una máscara diciendo que es tuya cuando no es tuya”.
Esfinge seguirá en el camino de la lucha libre en busca de avanzar con su carrera dentro de los representantes más importantes de nuestro país. Seguramente nos sorprenderá con nuevos diseños de una máscara que ha generado el interés de muchas personas, sobre todo de aquellos coleccionistas que están dispuestos a pagar grandes cantidades de dinero para hacerse de ellas.
El mundo de la lucha libre respira a partir de estas historias, que no son, más que el reconocimiento a lo que se hace dentro y fuera del ring. Dentro, porque las buenas actuaciones en el cuadrilátero forjan a los ídolos de quienes todos queremos una pieza de colección. Y fuera, porque el trabajo y empeño en los diseños de las máscaras también es parte de lo que hace la diferencia entre los grandes.
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