El Real Madrid no es equipo de Champions League | OneFootball

Mientras el Barça femenino se pasea en España y avanza con paso firme en la Champions League ganando todos sus partidos con autoridad, el Real Madrid femenino improvisado por Florentino Pérez acumula fracasos y humillaciones. La última, fuera de la Champions League en la fase de grupos habiendo conseguido un punto de los 18 posibles. Es decir, un empate y cinco derrotas.

Un punto de 18 posibles

Y con estos argumentos Alberto Toril, el entrenador del Real Madrid se atreve a afirmar que las "distancias con el Barça se han acortado". Quizá basándose en el 9-0 que anotaron las de Jonatan Giráldez al Real Madrid en sus dos recientes enfrentamientos: 5-0 en Liga y 4-0 en la Supercopa.

Lo cierto es que el Real Madrid ha perdido hoy en casa ante el modesto Häcken sueco por 0-1 y cierra su participación en la Champions League con un punto sobre 18 posibles y como farolillo rojo de su grupo. De hecho, el equipo madridista ya estaba eliminado en la cuarta jornada.

Probablemente, este nuevo ridículo del Real Madrid tendrá respuesta adecuada de sus responsables. Volverán a sacar el talonario y seguirán fichando, fichando y fichando, como han hecho siempre en sus cuatro años de existencia. De hecho el Real Madrid existe porque compró la licencia del Tacón para poder competir -es un decir- con el Barça.

¿Es esto la nueva dimensión del fútbol femenino?

Se entiende que las gradas estuvieran prácticamente vacías. Nada que ver con la experiencia que vivieron las jugadoras del Real Madrid hace dos años, cuando el Barça las apeó de la Champions League en el Camp Nou ante más de 91.000 espectadores, una cifra que jamás se verá en el Bernabéu ni aunque se produzca el milagro de que el Real Madrid femenino se convierta en equipo ganador, algo que a día de hoy queda muy lejos de su alcance.

Hace cuatro años, cuando el Real Madrid compró el Tacón y se anunció a bombo y platillo su presencia en la Primera División del fútbol fermenino, el diario Marca, claro exponente del madridismo sociológico, el del bombo y platillo para todo lo suyo, anunció pomposamente ocupando toda su portada: "El fútbol femenino entra en otra dimensión". ¿Era esta la dimensión anunciada?