El Real Madrid llora más blanco: Roncero avanza una catástrofe esta noche Vallecas | OneFootball

Si al Barça le pitan un penalti porque un balón le pega en el brazo a Balde en Mallorca, bien pitado está. Decía Iturralde: "tenía el brazo en forma de ele, haciéndose grande". Si le anulan un gol a Güler por lo mismo, robo al Madrid de la Liga mugrienta.

Y eso que la Federación le ha dejado a Florentino un Comité de Árbitros apañadito y a su medida, cambiándolos a todos menos a la mujer de su empleado a sueldo.

Más penaltis que nadie y se quejan de Negreira

Pero el madridismo va de rabieta en rabieta cuando le pitan algo que no gusta. Acostumbrados, sin VAR, a los errores que sumaban títulos, eso de que una imagen te rompa la ilusión lo llevan mal.

Hasta se quejan de un fuera de juego señalado a Mbappé por milímetros. Claro, antes, sin VAR, cuando era cuestión de milímetros, siempre a favor del Real Madrid. Eso se ha perdido con la tecnología y da para rabiar mucho.

Siguen en la línea de disfrutar de más penaltis a favor que nadie y de menos en contra que los demás, pero siguen quejándose. Se quejan por todo. Antes y después de los partidos.

Tomás Roncero ya acongoja al árbitro del Rayo-Barça

Querrían que los árbitros saltaran al césped cantando el himno del Real Madrid y, como no lo hacen, son antimadridistas. Así funciona el negocio de la propaganda. Es hereje antimadridista todo el que no llora con los éxitos y fracasos del Real Madrid.

Tomás Roncero es subdirector de un periódico de tirada nacional como AS (y luego dicen que no existe el madridismo sociológico). Después de derramar su dosis lacrimógena por la "Liga mugrienta de Negreira" (hace años que no está, pero es igual) acosa al árbitro con otra de sus predicciones de adivino frustrado:

"Pobre Rayo la que le espera con el arbitraje" (ante el Barça).

Es el mecanismo del aparato de propaganda al servicio de Florentino. Y en esa tarea están todos, no se trata de medios aislados. El madridismo sociológico no es universal, como dice Florentino, pero sí es madrileño y capitalino.

España tiene que ser del Real Madrid desde Portugal a los Pirineos, y el que no lo entienda, no carbura bien.

"Esto es escandaloso -dice Roncero-. El arbitraje español está en su mayor caída libre de la historia del fútbol europeo. Dos goles anulados de forma penosa y terrible.

El mismo día que al Atleti le regalan un punto con un gol en fuera de juego. Pobre Rayo la que le espera mañana con el arbitraje".

Y es que la memoria es selectiva. Los propagandistas de la causa blanca no recuerdan el penalti inexistente pitado a Mbappé en la primera jornada ante Osasuna.

Ni el penalti señalado contra el Barça en Mallorca. Ni la falta de Tchouaméni no señalada en el primer gol de Mbappé en Oviedo. Se acuerdan de lo que les interesa

Alfredo Relaño: Del relato del villarato a Negreira y tiro porque me toca

Los milímetros solo escuecen cuando no favorecen al Real Madrid | RFEF

Alfredo Relaño, más objetivo que su colega Roncero, insiste sin embargo en As en lo de Negreira. Fue el inventor del término "villarato". Y no puede permitir que un recurso tan práctico como el de Negreira caiga en el olvido, aunque ya no esté.

"El Bernabéu no se olvida de Negreira. El madridismo tiene clavada la impunidad de los 17 años de Negreira como asalariado del Barça". Y recurriendo a Negreira seguirán tapando en los próximos años todas las barrabasadas arbitrales a su favor.

Aunque, eso sí, ni una sola prueba de que esa "liga mugrienta" haya sido amañada. Y ya vamos por el tercer año buscándolas.

Luego se sorprenden de los cánticos del Bernabéu sobre Negreira. ¿Y qué van a cantar si en los medios solo leen, escuchan y ven referencias a Negreira?

Pero de Yolanda Parga y su marido a sueldo de Florentino, ni una palabra. No se puede, no dejan.