El motivo por el que Frenkie de Jong se ha 'enemistado' con la prensa | OneFootball

Las imágenes de las pruebas físicas de Frenkie de Jong encendieron las 'alarmas' en el barcelonismo. Las redes sociales se vieron 'revolucionadas' cuando salieron a la luz las fotografías en las que se podía apreciar el tobillo del centrocampista relativamente inflamado, dándole inicio a una 'campaña' que iba de las críticas a la preocupación por el estado de la lesión del internacional con la selección de Países Bajos.

Sin embargo, en Can Barça pusieron 'paños fríos' a la situación al revelar que el mediocampista estaba prácticamente recuperado de su lesión y que su regreso a los terrenos de juego estaba cada vez más cerca. Según el diario 'AS', desde el club aseguraron que el único problema es que Frenkie tenía que coger la forma y el ritmo de competición tras haber estado casi tres meses en la enfermería, con el condicionante de veinte días de vacaciones tras haberse 'bajado' de la lista de Koeman para la Eurocopa.

De la misma forma, la fuente anteriormente mencionada confirmó que el neerlandés se mostró bastante 'mosqueado' por todos los rumores que salieron a la luz en los últimos días sobre su lesión de tobillo. Rumores que, además, se vieron alimentados por el hecho de que no regresara antes a la Ciutat Esportiva Joan Gamper para adelantar plazos en su recuperación.

Es bien sabido que la relación de De Jong con la prensa no es la mejor de todas, y las últimas informaciones sobre su tobillo no han hecho más que echarle más 'leña al fuego'. Aunque es cierto que el centrocampista intentó forzar para llegar a tiempo a la Eurocopa, la realidad es que el futbolista no estará un mes más en el dique seco, tal y como especulaban algunos rumores. De hecho, en Can Barça se habla de unos 10 a 15 días para que Frenkie se reincorpore a la dinámica del primer equipo, por lo que podría estar disponible para la gira por los Estados Unidos.

No sufre una lesión crónica

De Jong ha estado fuera de los terrenos de juego desde el pasado 21 de abril, cuando sufrió un esguince de grado dos en el tobillo derecho tras un fuerte cruce con Federico Valverde. La lesión volvía a ser en el mismo tobillo que había sufrido dos incovenientes más esa misma temporada, empeorando su diagnóstico. Sin embargo, los servicios médicos del club descartaron rotundamente la lesión crónica de la que hablaban algunas informaciones, atribuyéndole la gravedad del problema físico a la "mala suerte". No obstante, Frenkie ya ve la 'luz al final del túnel'.