MuyDeFútbol
·17 de octubre de 2024
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La clasificación del grupo tercero de Segunda RFEF es engañosa. En primer lugar, porque apenas han transcurrido siete jornadas, es decir, el equivalente al 20,58% de la competición regular. Asimismo, todos los equipos están cerca en cuanto al número de puntos debido a lo ajustada que está la liga. Así pues, el Lleida se encuentra en una posición delicada, pero a la vez puede soñar alto.
Salta a la vista el irregular arranque leridano, ya que pese a ganar a Cornellà y empatar contra Atlético Baleares, ambos recién descendidos de 1a RFEF, los resultados no acaban de acompañar a los pupilos de Marc Garcia. De hecho, tan solo han sumado 9 de los 21 puntos en juego, fruto de dos derrotas, tres empates y un par de victorias. Precisamente, una de estas fue en su desplazamiento a Sant Andreu, el actual líder. Por lo tanto, certifica que los del Segriá tienen argumentos para sacar adelante sus partidos.
Adri Gené celebrando un gol en el Narcís Sala. Fuente: @lleidacf
Conviene destacar que el cuadro de la terra ferma estrenará la octava fecha en su visita a la Ciudad Deportiva Juan Ángel Romero. En particular, el sábado a las 12:00 se medirá al Elche Ilicitano, el cual está en una cómoda posición de playoff, pero tan solo aventaja en cuatro puntos a los catalanes, emplazados en el playout.
Por otro lado, teniendo en cuenta que será el único duelo del sábado, el resultado final manifestará un cambio significativo en la clasificación, al menos por unas horas. En caso de victoria local, el segundo equipo dormiría líder en solitario, mientras un triunfo visitante movería al Lleida CF de la decimotercera posición a la quinta, ocupando así plazas de promoción de ascenso.
Paralelamente a la competición doméstica, en Lleida se tiene entre ceja y ceja el compromiso copero del próximo miércoles 30 de noviembre, contra el Barakaldo. Este tendrá lugar en el Camp d’Esports a las 20:00 y contará con una asistencia digna de las grandes noches de fútbol que vivió la ciudad años atrás. Así pues, la Copa del Rey servirá como vía de desconexión liguera y motivo de alegría entre la afición.
Por si fuera poco, los azules también disputarán la Copa Catalunya, un torneo de carácter oficial donde querrán llegar lejos. El primer obstáculo será el Prat, en la eliminatoria correspondiente a la quinta ronda, a partido único y fuera de casa.