El legado de Chris Wilder en Sheffield | OneFootball

El Sheffield United y Chris Wilder han separado sus caminos de mutuo acuerdo poniendo fin a una relación de casi 5 años

Se terminó. 5 años después de llegar al Sheffield United, Chris Wilder deja de ser el entrenador. En una temporada difícil donde la salvación está prácticamente imposible, unas desavenencias entre Wilder y la directiva ponen punto y final a su etapa al frente de los Blades. Paul Heckingbottom será el que tenga el cargo hasta final de temporada. De hecho, ha debutado con una contundente derrota por 5-0 contra el Leicester City. Así, Chris Wilder deja un legado al alcance de muy pocos.

Primer año y ascenso

Llegado en el intervalo primavera-verano de 2016, Chris Wilder encontró un Sheffield United que finalizó la temporada anterior en mitad de tabla. Para su temporada de debut, perdió a jugadores clave como Che Adams, Calvert-Lewin o Aaron Ramsdale.

Pero incorporó nombres como Simon Moore, John Fleck o Jack O’Connell, que sumados a Billy Sharp y Chris Basham continúan en la primera plantilla, algunos de ellos siendo importantísimos. Con una plantilla limitada, Wilder logró ganar la EFL League One y ascender a Championship.

Dos años en Championship para tocar la gloria

Su primera temporada en Championship fue tranquila. Sin sufrir grandes bajas, incorporaron jugadores como George Baldock, John Lundstram o Enda Stevens. A estos jugadores se sumó un David Brooks que si ya brilló en League One, fue clave para lograr la décima posición en Championship.

Y llegamos a la temporada 18/19. Perdiendo a David Brooks, su mejor jugador la pasada campaña, el Sheffield afrontaba la temporada con el objetivo de la salvación. Llegaron jugadores como John Egan, Ollie Norwood, David McGoldrick o Dean Henderson cedido. Y bajo una gran dirección de campo de Wilder, el Sheffield logró lo impensable: el ascenso directo a Premier League como segundos clasificados.

Un debut en Premier inesperado

Con todo, y con 2 ascensos en tres años, el Sheffield era el candidato número uno al descenso. Sin bajas destacadas, y con incorporaciones como McBurnie, Lys Mousset, Ben Osborn, o la ratificación de la cesión de Henderson, el Sheffield no pintaba bien. A ellos se sumó Sander Berge, que llegó en invierno. Pero sorprendieron a todos.

Con su caracerístico 3-5-2 en el que los centrales doblaban a los carrileros, y Norwood guardaba la posición. Con un delantero nada goleador pero muy combinativo como McGoldrick, y un Sharp saliendo desde el banquillo, el Sheffield dio la campanada. Finalizaron la temporada novenos con 54 puntos, a 5 de los puestos de Europa League. Y siendo un equipo adorado en el mundo por su carisma y lucha.

El fin de una era

Y así llegamos a la temporada actual. Un Sheffield que, pese a ser la sorpresa, seguía teniendo grandes carencias. Fichajes interesantes como Burke, Jayden Bogle, Max Lowe o Rhian Brewster llegaban para rejuvenecer la plantilla, y Brewster en concreto para tratar de dar el gol que le faltaba. A ellos se suma el retorno de Aaron Ramsdale, que llegaba para cubrir la baja de Dean Henderson. Clave esta operación para entender el devenir del equipo.

Así, la temporada se encuentra en marzo, con el Sheffield colista con 14 puntos. Difícil de explicar el rendimiento de un equipo que, salvo la baja de Henderson, es prácticamente el mismo. Y puede que ahí esté el fallo. Porque esta campaña, el nivel medio de los equipos en Premier ha subido. Clubes como Southampton, Brighton o Aston Villa tienen más calidad que el año anterior, a los que se suman un Fulham o Leeds United con un juego vistoso y propositivo. A esto se suma la baja de Henderson y las lesiones de pilares del equipo, y tenemos los malos resultados.

Pese a todo, siempre se ha ratificado a Chris Wilder. Porque el legado del entrenador inglés en Bramall Lane es histórico. No sería extraño que en unos años, veamos una estatua suya en las puertas. Porque pese a salir por desavenencias, es innegable que Wilder ha cambiado Sheffield.

La plantilla queda tocada

La salida ha dejado a gran parte de la plantilla dolida. Jugadores importantes como Egan, Basham, Billy Sharp, Lundstram o Norwood han expresado el respeto y admiración al ya exentrenador del Sheffield en redes sociales. Dean Henderson, que no sería lo que es sin Wilder, también ha dedicado un tiempo ha alabarle. Porque ya no es sólo lo logrado en el campo, es lo que Wilder ha significado para estos jugadores. Porque sin que el «gaffer», como conocen a Wilder, pocos habrían tenido la oportunidad de disputar la Premier League. Pocos habrían demostrado sus capacidades contra los mejores de Inglaterra, y pocos tendrían hueco en la máxima división inglesa.

Ahora sólo queda mirar a la próxima temporada. Porque si bien la salvación es un sueño prácticamente inalcanzable, el equipo debe seguir. Es cierto que necesitarán un nuevo capitán de barco, y que muchos jugadores probablemente abandonen el club para seguir en Premier. Pero si hay algo que está claro, es que gracias a Chris Wilder, seguiremos pendientes del Sheffield United esté donde esté.