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·27 de enero de 2023
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·27 de enero de 2023
Carlos Peña, mejor conocido como "Gullit" debido a su parecido físico con el histórico futbolista neerlandés, se consagró como una de las grandes promesas perdidas de todo el fútbol mexicano. Después de su éxitoso paso por el León bicampeón de la era de Gustavo Matosas y de incluso colarse a la copa del mundo de 2014, el creador de juego se perdió en el camino, vagando por muchos equipos sin poder echar raíces fijas y estables en algún club.
Desde su paso por Chivas, hasta su aventura por Escocia con el Rangers, Peña fue víctima de su tradicional indisciplina. El jugador mexicano tiene un gusto enorme por la fiesta y el excesivo consumo de bebidas alcohólicas, hecho que lo llevó a jamás trascender como su talento pudo permitirle. Hoy, tras un paso por equipos de Centroamérica, el mexicano ha firmado por el fútbol árabe donde se convertirá en uno de los jugadores nacionales mejor pagados del planeta.
Peña ha firmado su vínculo con el Al Dhaid Sharjah de Árabia Saudí, y más que una experiencia deportiva, parece que el mexicano está en búsqueda de llenar su cartera en la etapa final de su carrera, pues el club de los jeques le ha firmado por un año y medio a razón de 1,8 millones de dólares, una cifra muy superior a los 120 mil dólares que percibía en el Club Deportivo Fas de El Salvador. El sueldo de Carlos estará por encima de lo que gana Ochoa en Italia y otro mexicano como Henry Martín en América.