El héroe inesperado | OneFootball

Alfon vivió ayer uno de sus grandes días como futbolista. El albaceteño, ante la ausencia de Swedberg por gripe, fue la opción elegida por Claudio Giráldez para cambiar el rumbo del partido en la segunda mitad cuando el Celta perdía por dos goles ante todo un Barcelona. Con su entrada al terreno de juego cambió la energía del equipo, y se hizo patente muy pronto.

Primero con una acción que acaba en gol pero fue anulada porque el balón había salido por la línea de fondo, y después con la acción de Koundé, que se despista y se encuentra con un peleón Alfon que se lleva el balón y bate al sorprendido Iñaki Peña, que hasta ese  momento había llegado a todos los balones.

Es cierto que es un fallo grosero de Koundé, ya que así lo definió el propio jugador barcelonista, pero no es menos cierto que la fe de Alfon es lo que convierte ese error en un drama para el jugador francés. ¿Hubiera tenido la misma fe otro futbolista en esa jugada?.  La insistencia de Alfon tuvo premio, y encendió la mecha que acabaría con una remontada que incluso pudo ser completa si el taconazo de Borja Iglesias hubiese sorprendido al meta catalán. Si marca ese gol, seguramente no hubiese sido necesario derribar la grada de Gol. Se hubiera caído probablemente todo el estadio.

Claudio Giráldez conoce muy bien a Alfon. Sabe lo que le puede dar, conoce sus virtudes y sus defectos, y acertó totalmente con su entrada al terreno de juego en ese momento. Cierto que la expulsión de Casadó ayudó, pero el manchego era lo que necesitaba en ese momento el equipo.