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Tras muchos meses, sufrimiento y tensión, el Sánchez-Pizjuán vuelve a disfrutar del sabor de la victoria. Cuatro meses después, el Sevilla FC al fin obtuvo buenas noticias en Liga con el triunfo ante el Getafe. Jesús Navas anotó el único tanto del partido en una muestra más de lo que representa para el sevillismo. Tres puntos muy sufridos que saben a oro puro, ya que los de García Pimienta salen momentáneamente de la zona de descenso.

El Sevilla FC abre la lata

Desde la victoria ante el Granada (3-0) la pasada campaña, el Sevilla FC no había vuelto a obtener buenas noticias en la competición doméstica. Los de García Pimienta habían sumado dos puntos de doce posibles en las cuatro primeras jornadas. La debilidad defensiva y la falta de acierto arriba, las principales razones. En torno a ambos factores gira la rueda del fútbol, y en el Sevilla esa rueda no estaba ni inflada.

Jesús Navas marca el gol del triunfo del Sevilla ante el Getafe | Imagen: Fran Santiago/Getty Images

No era ni por asomo el día previsto para que el Sevilla FC empezase a obtener buenas noticias en lo deportivo. Y mucho menos por lo que había sido protagonista en la antesala del partido: la multitudinaria protesta hacia la gestión de la directiva, personificada en el presidente Del Nido Carrasco. Tampoco lo era por el rival, el especialista de los empates. No obstante, el destino quiso que Jesús Navas tirase de casta y coraje y anotara el gol del triunfo para los sevillistas.

Jesusito de mi vida

El palaciego sumó, como extremo, su primera titularidad del curso, aunque en el club estaban preocupados por su estado físico estos últimos días. El propio Jesús lo reconoció a pie de campo: «Hace dos días no podía ni andar, pero las ganas me pueden más. Siempre me levanto por este escudo, que es lo que más quiero«. No había nadie mejor para inaugurar el marcador ni para que el Sevilla FC empezara a obtener buenas noticias en medio de tanta crispación. Jesús Navas anotó con un derechazo con mucha, mucha rabia. La rabia de todo el sevillismo, sabedor del horizonte que le espera al club si no cambian mucho las cosas. La celebración, otra muestra de lo que siente por el club. Quizá el único que pueda darse golpes al escudo. Seguramente, porque lo siente como ninguno.

Jesús Navas, en la celebración del gol frente al Getafe CF | Imagen: Sevilla FC

Jesús Navas volvió a marcar más de cinco años después con el Sevilla. Con 38 años y 298 días, el jugador más veterano en marcar en Primera División con el club hispalense. El jugador con más títulos y partidos en la historia de la entidad. En diciembre disputará el último antes de colgar las botas, a menos que García Pimienta logre convencerle. En todo caso, el técnico catalán se rinde a sus pies: «Jesús es un ejemplo para todos, la gente joven tendría que aprender de él. Siempre con una sonrisa y siempre trabajando bien. Este es el ejemplo y ojalá la cadera le permita aguantar hasta la retirada».

Las claves del Sevilla FC ante el plan de Bordalás

García Pimienta introdujo varias novedades en el once. Además de la titularidad de Jesús Navas, la de Peque fue una de las noticias en el once del Sevilla FC. El catalán estuvo algo perdido durante la primera mitad, sin lograr conectar con nadie. Tras el paso por vestuarios, se entendió la decisión de Pimienta. A falta de jugadores creativos como Suso o Saúl, el Sevilla quiso ganar verticalidad por dentro con Peque. El ex del Racing llevó la batuta en tres cuartos. Supo detectar espacios a la espalda de los azulones, y atacar esos espacios para arrastrar a los defensores y permitir el ataque por banda. Estuvo en constante movimiento, ofreciendo líneas de pase para saltar la presión de los de Bordalás. Suyo fue el pase a Isaac Romero, que realizó el primer disparo a puerta del encuentro. No estuvo muy acertado el delantero sevillista. Recibió un pase directo de Nyland que lo dejó ante un David Soria algo adelantado. El lebrijano mandó arriba el esférico. Aún no se ha estrenado esta temporada, aunque él se mantiene tranquilo.

La pareja de centrales fueron esta vez Nianzou y Marcão. Ambos consiguieron mantener la portería a cero, con los apoyos de Gudelj y Sow, que tuvieron que retrasar su posición para no sufrir en la salida de balón. Los de Bordalás realizaron una presión asfixiante, muy adelantada, buscando el error de la defensa sevillista para poner la directa hacia la portería de Nyland. Nianzou cometió el primero. Suerte que Marcão estuvo atento para rebañar la pelota y ahuyentar el peligro. Aunque fue una acción del brasileño en la que solamente el palo evitó el tanto de Uche. El ex del Galatasaray, no obstante, firmó un encuentro notable, teniendo que retirarse conmocionado por el codazo de Carmona.

Bochorno de Busquets Ferrer

El árbitro balear pudo hacer que el partido no terminase con buenas noticias para el Sevilla FC. Una actuación marcada por dos acciones en concreto que mantuvieron al Getafe con vida. La primera, una mano no pitada en el área de los madrileños. En un saque de esquina, el balón le golpeó a Bertug en el brazo, que estaba muy despejado del cuerpo, cortando así una clara acción de peligro. Sin embargo, ni el colegiado ni el VAR vieron nada punible. Sí lo vieron en la derrota ante el Girona. El 0-2 de los catalanes vino de un penalti por una mano de Isaac Romero, en la que el lebrijano está de espaldas. Una acción mucho más dudosa, pero que el VAR no dudó en señalar la pena máxima.

La imagen de televisión del penalti no señalado a favor del Sevilla FC ante el Getafe CF. Imagen: Cuenta de Twitter de Archivo VAR.

La segunda, la expulsión por doble amarilla de Juanlu. El quinteño se interna en el área y recibe el contacto de Berrocal. Busquets Ferrer no lo ve y decide sancionarle con segunda amarilla y dejar al Sevilla con uno menos a falta de tres minutos para el alargue. Quizás no sea suficiente para pitar penalti, pero existe contacto, por lo que no cabe pensar en una simulación. El Sevilla FC tuvo que estar con uno menos durante 17 minutos y estuvo cerca de no obtener buenas noticias en forma de victoria.

Respiro para García Pimienta

La primera del catalán al frente del banquillo sevillista y la primera tras dieciocho jornadas sin conocer la victoria. Él respira, y el club también. Al fin buenas noticias para un Sevilla FC que suma cinco puntos y abandona la zona baja de la clasificación. Mendizorroza será la próxima batalla, donde puntuar es casi obligatorio. Ojalá este haya sido el punto de inflexión, al menos en lo deportivo. En lo institucional, habrá que esperar a la próxima Junta de Accionistas.