Desconcierto total | OneFootball

Otra caída más. Independiente perdió en su visita a Velez. Fue 2 a 1 en el Amalfitani, con el empate parcial de Felipe Loyola. Para el local marcaron Godoy y Braian Romero.

Qué decir. Cómo explicar esto. Y lo que es peor: ¿Cómo asimilarlo y cómo se hace para entenderlo? Lo cierto y la única la realidad es que Independiente volvió a caer.

Esta vez fue por 2 a 1. Y sí, está usted leyendo muy bien: el Rojo volvió a convertir. Pero de nada sirvió, más que para un corto e insuficiente desahogo tras varios partidos de sequía. Lo marcó Felipe Loyola y de penal.

Lamentablemente el equipo de Julio Vaccari perdió una vez más. Con otro rendimiento apático, y esta oportunidad condicionado por la expulsión de Kevin Lomónaco cuando el primer tiempo promediaba. Porque pisando los 30m de la primera parte, una mala decisión del zaguero derivó en penal para el local y tarjeta roja al 26. El pibe Godoy, de Velez, ahí estaba para empezar a torturar a un equipo que se derrumba y se hunde partido tras partido.

Franco Paredes ingresó, luego de algunos meses, en lugar del "Cumbia" para ocupar dicho sector junto a Sebastián Valdez. Monólogo del Fortín hasta que terminaron los primeros 45 minutos. Nada nuevo.

En el segundo tiempo, Independiente se fue aproximado. Cómo pudo y a los empujones, llegó al 1 a 1 gracias a un penal también sobre Pablo Galdames. A los 76m, Felipe Loyola agarró la pelota, tomó la responsabilidad y la mandó a guardar, para, insistimos, desahogarse. Porque el Rojo no convertía hace cinco partidos.

Una pena, porque la 'felicidad' (otra lástima tal parámetro), iba a durar muy poco. Cuando los minutos pasaban y el final se acercaba, una polémica decisión de Rey Hilfer volvió a condenar a los Rojos. El juez cobró una sujeción de Jonathan De Irastorza al hombre rival. El resto, ya lo sabemos: penal y gol de Braian Romero para el 2 a 1 final de Velez Sarsfield. Todo esto, a los 84 del complemento.

El cotejó terminó con otra derrota para los de Avellaneda, al mismo tiempo que una nueva decepción que no hace más que tumbar al  hincha, que de estas ya conoce varias. Y aguantarlas, ni te cuento.