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Carlos Muñoz del Real·17 de agosto de 2019
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Carlos Muñoz del Real·17 de agosto de 2019
Victoria del Real Madrid ante el Celta por 1-3 en un partido donde Luka Modric acabó expulsado por roja directa y Bale fue de lo mejor del partido.
La gran novedad en este inicio de temporada del Real Madrid estuvo en Gareth Bale, el galés pasó de denostado a titular y la verdad es que se marcó un partidazo. Empezó en banda derecha a pierna cambiada, ayudando en defensa a un Odriozola que no tuvo su mejor día, pero cambiaba con Vinicius la posición.
Suya fue la asistencia a Benzema en el primer gol del Madrid en esta Liga tras un buen recorte. Bale estaba muy cómodo, atacando el espacio pudo marcar su gol, clásico de él, zurdazo que en esta ocasión atajó el portero. Su primera parte fue espléndida y dejó claro que está para dar mucha guerra y ponérselo difícil a un Zidane que lo cambió a los 74 minutos.
Deslució en la segunda mitad tras la expulsión de Modric, no así un Real Madrid que estuvo efectivo de cara a puerta. Kroos y Lucas Vázquez (con dedicatoria especial) cerraron el estreno de los de Zidane en esta Liga. El Celta logró en el 91 el gol del honor obra de Losada, de tiro cruzado.