Cultural 2 – 1 Barakaldo: los leoneses hacen los deberes y apuntan al Toralín | OneFootball

La Cultural derroca al Barakaldo en el Reino de León y la semana que viene podría convertirse en equipo de segunda división

Recuperó la Cultural la sonrisa en el Reino, no exenta de sufrimiento. La efectividad, esa que tantos dolores te ha causado en los últimos tiempos, otorgó los tres puntos a los leoneses frente al Barakaldo. Y, es que, el conjunto vasco tuvo, además del gol, cuatro ocasiones manifiestas para haber rascado algún punto: tres postes y un balón sacado bajo palos por Chacón. Sin embargo, a tres jornadas para la conclusión, el cómo pasa a un segundo plano cuando los tres puntos están en el bolsillo. El resultado de la Ponferradina mañana en Zubieta determinará qué se necesita en el Toralín, pero matemáticamente los de Llona podrían cantar el alirón la próxima semana en territorio berciano.

Falta de precisión

No era día para guardar ni conservar jugadores y Raúl Llona, a excepción del sancionado Pibe, optó por salir con toda la artillería. Volvió al sistema de dos mediocentros puros, apostando por Bicho y Maestre con Chacón en la mediapunta. ¿El beneficiado? Un Santi Samanes que no olía una titularidad desde el pasado marzo en Barcelona. Imanol de la Sota, por su parte, dejaba en el banquillo de inicio a Pablo Santiago, máxima referencia de los vascos con 11 goles y 10 asistencias, pero que llegaba justo tras varias semanas lesionado. Luis Bilbao, quién vistiese la elástica culturalista la temporada pasada, también aguardaba su oportunidad desde la banqueta.

La presión, más aun después de la victoria del Andorra en el Johan Cruyff, era tan notoria como el aliento de una afición inagotable. Y, es que, León tiró la casa por la ventana en la previa para alentar a su equipo. Corteo, recibimiento al autobús...su labor estaba hecha y le pasaban la cuchara a los jugadores. Estos respondieron con actitud e intensidad de inicio, focalizada en un Santi Samanes que demostraba tener un hambre y una garra mayúscula. Sin embargo, en parte por el encharcado del césped, les faltaba precisión a partir de tres cuartos para crear peligro real.

Un testarazo de Satrústegui a la salida de un córner que se marchó lamiendo el poste fue la acción más peligrosa (y la única) de la que dispuso la Cultural. El Barakaldo, lejos de amedrentarse o dejar entrever que un punto les podría satisfacer, trataba de salir jugando desde atrás y presionaba arriba a los de Llona. Revilla, con un disparo desde lejos, probaba fortuna, pero siquiera llegaba a intimidar a un Bañuz que la despejaba con la mirada. Así, inmerso el choque en una dinámica neutra en la que nadie terminaba de someter a su rival, se llegó a la media hora.

Samanes pone al Reino en pie

Llegaron, a partir de dicho momento, los mejores momentos de la Cultural. Calderón se cocinó una jugada él solo que acabó estrellándose en el larguero, pero indicó el camino a sus compañeros. Romper a través de conducciones y encontrar los huecos por la banda. Así, después de una buena combinación, recibió el `7´ con espacios y le colocó un caramelo a Samanes, quién, a puerta vacía, sólo tuvo que empujarla. El `león´ de Berrizoar puso en pie al unísono a las más de diez mil almas que poblaban al Reino de León y, por primera vez en varios meses, los de Llona se ponían por delante antes del descanso.

Los quince minutos restantes fueron mundanos, direccionándose la lucha hacia el centro del campo. Un error grotesco de Álvaro, que corrigió Bañuz tapándole cualquier hueco disponible a Pedernales, fue lo único significativo en lo puramente deportivo. Maestre, en aquello que no se puede controlar, tuvo que tomar el camino a las duchas antes de tiempo quejándose de su gemelo diestro. Barri, en un cambio aparentemente ofensivo de los locales, pues la sustitución más natural sería Kevin Presa. Poco mal era para una Cultural que, por cuarta vez en los últimos 25 partidos, se iba al asueto con ventaja en el electrónico.

Efectividad en estado puro

El mayor peligro de los leoneses en la reanudación eran ellos mismos, dormirse en los laureles en vez de buscar el segundo. Y, lo cierto, es que en los primeros compases de la segunda mitad los temblores se propagaron. Txuoperena botó una falta perfecta que Pedernales a punto estuvo de ratificar gracias a una zaga culturalista que se quedó a verlas venir. El larguero, en esta ocasión, les salvó de tener que regresar al punto de partida.

Siguió haciéndose pequeña la Cultural con el paso de los minutos y de tener controlado el tempo del encuentro pasó a sufrir las arremetidas del Barakaldo. Txuoperena, tras bajar del cielo un envío directo de su guardameta, erró una finalización que podría haber significado un tanto de bandera. No esperó más Imanol de la Sota para arriesgar con Pablo Santiago y este, en la primera que tuvo, comprobó la robustez del poste diestro de la portería salvaguardada por Bañuz.

Fuente: Peio García/Leonoticias

Paradójicamente, cuando peor lo estaba pasando la Cultural, cuando sus tímidos acercamientos llegaban tan solo a través del balón parado, apareció Barri para dictar sentencia. El charro aprovechó una dejada de cara de Escobar tras centro de Chacón para, con un disparo milimétrico desde la frontal, batir a Jon Tena. El Reino, dos minutos más tarde, volvió a rugir con una acción de Chacón que, pese a no contabilizarse en el luminoso, también era valor gol. El `10´ sacaba bajo palos una nueva ocasión clarísima del Barakaldo.

Susto final

La efectividad, esa estadística que lo define todo y que ha hundido a la Cultural en los últimos meses, ahora se convertía en una amiga inmejorable. El tiempo jugaba en contra de un Barakaldo cada vez más cansado y menos clarividente al que las ganas sus ganas le jugaban errores de precipitación por momentos. Los locales, bien asentados y con Llona doblando lateral en el costado diestro, se hacían fuertes atrás.

Al contrataque, aprovechándose de que su rival estaba obligado a ir a tumba abierta, disfrutó Escobar de un mano a mano con el que redondear la contienda. Tena, está vez sí, repelió el esférico. Un nuevo infortunio en calidad de lesionado se cebó con la Cultural al filo del tiempo reglamentario. Barri, precisamente tras conducir la contra que acabó con el mano a mano de Escobar, notó un pinchazo en la zona del isquio que dejó a su equipo con diez hasta el final. La inferioridad se tornó en susto final con el tanto de Britto en el 92´ que tuvo en vilo al Reino hasta el pitido final.

Ficha técnica

Cultural Leonesa: Bañuz, Guzmán, Fornos. Satrústegui, Álvaro, Maestre, Bicho (Adri Ruíz 81´), Chacón, Samanes (Presa 68´), Calderón (Lanchi 81´) y Justo (Escobar 68´).

Barakaldo: Tena, Jelbat (Martínez 87´), Markel, Muguruza, De Jesús, Ekaitz (Naveira 76´), Huidobro (Luis Bilbao 86´), Txuoperena (Pablo Santiago 60´), Pedernales, Revi y Valiño.

Amonestaciones: Maestre, Calderón, Escobar y Guzmán para los locales y Revilla, Jelbat para los visitantes

Colegiado: Pastoriza Iglesias

Estadio: Reino de León

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