Crónica: Un Chelsea implacable se impone a las buenas intenciones del Tottenham | OneFootball

El Chelsea se ha impuesto por 0-3 frente al Tottenham en la quinta jornada de la Premier League, en un duelo con dos partes muy distintas en la que los de Tuchel se terminaron imponiendo con mucha claridad.

El encuentro tuvo una gran intensidad desde los primeros minutos, con un Tottenham muy agresivo y vertical que trataba de encontrar a Son o a Kane caídos en alguno de los costados para poder darle continuidad a las acciones. Mientras que mantenía una actitud defensiva muy agresiva, presionando la salida de balón blue emparejados en un tres contra tres con Lo Celso acompañando a los dos puntas. Los de Tuchel se estaban viendo superados por el empuje y el vigor físico de su oponente, y únicamente se veían capaces de importunarlo sacando rédito de alguna imprecisión para transitar rápidamente, hacia el área de un rival que estaba empleando a Hojbjerg de tercer central en salida y a Kane para ocupar su espacio circunstancialmente, aprovechando sus cualidades para darle fluidez y pausa a las transiciones defensa-ataque.

Tras un comienzo vibrante, el Chelsea consiguió estabilizarse con la posesión gracias a los movimientos de un Mason Mount, que se estaba situando más cerca del doble pivote, en el inicio de las jugadas, además de la mayor altura a la que establecía su bloque y lo unido que este se mantenía. El equipo de Nuno se empezó a desvanecer, al rebajar su despliegue físico a la hora de encimar al adversario, además de atravesar mayores dificultades para mantener el cuero, aunque tampoco requería de muchos pases para llegar al último tercio de campo.

Sobrepasando la media hora de juego, los spurs superaron un tramo en el que fueron claramente superados, y recuperaron cierto protagonismo con la pelota. Manteniéndola durante más tiempo, pero sin ser capaz, al igual que su oponente, de finalizar ninguna jugada limpiamente ante la acumulación de efectivos en los carriles interiores manteniendo como única opción el jugar con los dos laterales que a su vez se veían obligados a retrasar el cuero o a buscar un pase peregrino, ante la perspectiva de batirse frente al lateral y al zaguero, en una clara inferioridad, ya no solo numérica, sino de calidad.

El equilibrio estaba siendo extremo, y este primer período estaba tomando tintes de una partida de ajedrez, en la que estaba primando la prudencia y los roles eran cambiantes, pues ninguno de los dos conjuntos proponía con la suficiente regularidad. Pero sobretodo, ninguno de los dos equipos quería conceder el centro del tablero. La consecuencia lógica con estas circunstancias, fue que los jugadores se fueron al vestuario tras una batalla muy física, que aupada por el respetable podía llegar a ser emocionante por momentos, pero en la que las situaciones de peligro apenas habían hecho acto de presencia.

El segundo tiempo comenzó con la entrada de Kanté por Mason Mount, que permitió a Mateo Kovacic jugar más liberado, y con los visitantes adelantándose en el marcador, tras un remate de Thiago Silva llegando desde atrás en un córner botado por Marcos Alonso. Con el 0-1, los de Stamford Bridge se envalentonaron y se aprovecharon del shock posterior al gol, por el que estaban pasando los locales, para adueñarse del esférico e intentar ampliar la ventaja en el marcador, como terminarían logrando cuando Kanté batió a Lloris con un lanzamiento lejano que Dier desvió con mala fortuna.

Tras el segundo tanto, los de Nuno intentaron no perderle la cara al partido y retomaron su presión sobre el inicio de la jugada de su oponente, pero fue en balde, pues la diferencia anímica era demasiado grande, y los campeones de Europa daban la sensación de ser gigantescos y más rápidos, aunque realmente no existiera tal diferencia. Pero los lilywhites empezaban a llegar un segundo más tarde a los lances, y a pesar de la entrada de Bryan Gil y Oliver Skipp, cambiando el esquema hacia un 1-4-2-3-1. Se iban a ver obligados a intentar encontrarle alguna grieta a un Chelsea que quiso ser protagonista absoluto en el juego, circulando la redonda con absoluta tiranía.

Los últimos 20 minutos del encuentro estuvieron marcados por la gran habilidad, con la que los dirigidos por Thomas Tuchel se instalaron en campo contrario gracias a una muy buena labor en la presión, logrando encerrar a su rival, llegando a cuajar un tramo final de partido sensacional. Asediando el área local, y generando importantes situaciones de peligro, en las que Lloris y alguna decisión equivocada en los últimos metros, impidieron un triunfo más holgado de los blues. Que siguieron buscando la portería contraria hasta el último instante, y se vieron nuevamente recompensados cuando Werner supo ver con una excelente medida del espacio-tiempo, el desmarque de Rüdiger que terminó batiendo al guardameta galo del Tottenham con un disparo pegado al palo. Que puso la guinda a un muy buen segundo período del Chelsea, que se coloca líder con 13 puntos, que terminó imponiéndose con gran autoridad a los spurs que permanecen séptimos con nueve puntos.

Ficha Técnica

-Tottenham: Lloris- Emerson, Romero, Dier, Reguilón- Hojbjerg, Ndombélé- Alli, Lo Celso- Son, Kane.

-Chelsea: Kepa- Christensen, Silva, Rüdiger- Azpilicueta, Jorginho, Kovacic, Alonso- Mount, Havertz, Lukaku.

-Goles: 0-1, min.49, Thiago Silva. 0-2, min.57, Kanté. 0-3, min.92, Rüdiger.

-Amonestaciones: Paul Tierney sancionó a Werner (min.80).