CRÓNICA | Tottenham 1-0 Manchester United: Adiós a 17 años de sequía | OneFootball

El Tottenham venció al Manchester United en la final de la UEFA Europa League, gracias al autogol de Shaw, poniendo fin a 17 años de sequía del equipo londinense. Los Spurs consiguieron así su tercera Europa League, sumándose a las ya logradas en las temporadas 1971-72 y 1983-84.

El frenesí de la final invadió San Mamés desde el pitido inicial. La intensidad de ambos conjuntos destacó durante la primera parte en detrimento de los londinenses, quienes sufrieron durante el inicio del partido. Pese a ello, los Lilywhites pudieron encontrar su comodidad dentro del encuentro y se pudo vivir un partido con muchas llegadas, aunque estériles. El primer disparo entre los tres palos vino en el minuto 40 para el Manchester United, pero fue el Tottenham el que se adelantó en el siguiente minuto tras un fortuito gol en propia meta por parte de Shaw. Los de Amorim apretaron para no llegar con desventaja al descanso, sin embargo, los de Postecoglou pudieron aguantar el resultado.

Tras el paso por vestuarios, el partido cogió una sintonía esperada: un Manchester United volcado en el ataque y un Tottenham centrado en defender. El desarrollo del segundo acto fue monótono en cuanto a intenciones, con ciertos destellos londinenses a la contra, a pesar del asedio mancuniano. En el tramo final, los de Amorim fueron con todo a por el empate, pero el aguante de los de Postecoglou y las acciones de Vicario le dieron el triunfo a los Spurs.

Primera mitad: Un error de Shaw adelantó al Tottenham

La presión de los Red Devils se hizo notar desde el inicio y crearon las principales ocasiones de peligro en los primeros minutos. Los de Amorim llevaron la tentativa, haciéndose con la posesión. Sin embargo, los de Postecoglou pudieron ponerse por delante alrededor del 10’, pero no supieron aprovechar un error de Maguire en la zona defensiva.

El Tottenham ganó consistencia aérea y pudo meter en problemas a un Manchester United blando a balón parado. Con ello, el dominio mancuniano se vio afectado y perdió protagonismo momentáneamente, para recuperarlo hacia el ecuador del primer acto.

Lo cierto fue que las ocasiones claras de gol se hicieron de rogar pese a la intensidad del encuentro y la cantidad de llegadas por parte de ambos conjuntos.

En el 32’, Bissouma se llevó un rodillazo de Mazraoui y dejó al jugador del Tottenham varios minutos tendido en el césped. Siete minutos después, Diallo provocó el primer disparo entre los tres palos de toda la final, pero la tímida intensidad del disparo no provocó problemas en la portería de Vicario.

Pese a ello, en el primer remate entre los tres palos por parte de los londinenses, Brennan Johnson ayudó a abrir la lata en el 41’. La puso Pepe Sarr desde la izquierda, el ‘22’ remató a regañadientes en el área chica y, tras rebotar en Shaw, el balón acabó dentro de la portería de Onana.

Tras el gol del Tottenham, el Manchester United se volcó en el ataque para lograr la igualada antes del descanso, pero los de la capital inglesa supieron aguantar y se fueron con ventaja al entreacto.

Segunda mitad: El United puso coraje, pero los Spurs supieron aguantar.

Por detrás en el marcador, los triple campeones de Europa salieron con una marcha más a por el empate, pero de manera cautelosa. Los de Amorim no perdieron la cabeza, se hicieron de nuevo con el control de la pelota, pero no asumieron demasiados riesgos.

Por su parte, los de Postecoglou se concentraron en la faceta defensiva, priorizando mantener la portería a 0 antes que ir a por el segundo. A pesar de ello, el Tottenham entendió que podía hacer daño a la contra, y en el 62’ tuvo una buena oportunidad para poner tierra de por medio, pero Solanke no logró realizar un buen control y Maguire se hizo con el esférico.

Cuatro minutos después, Richarlison cedió su puesto a Son, tras sufrir problemas físicos que no le permitieron continuar sobre el césped. Casi inmediatamente, el Manchester United pudo empatar el encuentro, sin embargo, Van de Ven evitó el gol en la línea con una acrobática acción al remate de Hojlund.

En el 70’, el técnico portugués quiso encontrar algo distinto sin cambiar lo táctico. Para ello, introdujo piernas frescas con Garnacho y Zirkzee, en lugar de Hojlund y Mount.

El recién incorporado argentino no tardó en probar a Vicario, revolucionando la zona de tres cuartos del arquero italiano. Ante ello, el entrenador griego introdujo a Danso por Brennan Johnson en el 78’, sumando un el elemento defensivo más para la recta final del partido.

El Manchester United fue con todo hacia arriba, pero la falta de ideas y el poco orden en las llegadas fortalecieron la solidez de los Spurs. La fe y el empuje de los de Amorim mantuvieron una final vibrante que pudo sentenciarse en varias ocasiones de contraataque de los capitalinos.

De cara a los últimos minutos, ambos técnicos movieron sus respectivos banquillos. En clave mancuniana, Dalot entró por Mazraoui, mientras que, en clave londinense, Sarr y Udogie fueron sustituidos por Spence y Gray.

Los siete minutos de añadido se caracterizaron por el asedio del Manchester United, sin embargo, los continuos centros de los de Amorim no pudieron franquear el muro del Tottenham.