Correa sacó chispas con ácida crítica a jóvenes futbolistas | OneFootball

Esta semana, el delantero titular de Colo Colo, Javier Correa, sorprendió con unas directas declaraciones. Unas potentes reflexiones sobre el estilo de vida y prioridades para las nuevas generaciones. Sus palabras calaron hondo. Correa sacó chispas con ácida crítica a jóvenes futbolistas.

El goleador de la tienda alba no escondió su malestar, apuntando que los jugadores estarían privilegiando aspectos extra, por sobre sus propias carreras. «Tú le dices a un pibe, no te compres ese auto y te dice: ‘¿Por qué no, si yo la plata la tengo?’ Va y se lo compra. Después, adentro de la cancha, el auto no juega. Adentro de la cancha tienes que entrenar al cien, venir temprano, acostarte temprano, hacer lo que tienes que hacer», criticó Correa, en entrevista con el canal de YouTube XDXT Play.

«Los pibes de hoy no te escuchan de esa manera. Quieren las mejores zapatillas. Tienen el anillo, el iPhone. Tienen todos los detallitos que hacen caminar por la calle para que te digan ‘ese es jugador de fútbol'», añadió el argentino de 32 años.

«Todos los clubes deberían tener a alguien retirado o que haya jugado, entre el vestuario y la calle. Es muy difícil, todos los pibes quieren salir y darse a conocer. Pero tiene sus pro y sus contras. Cuando todo va bien no hay problema, pero cuando todo val mal, suerte», puntualizó el goleador del Cacique.

Para ahondar en esto, Correa recordó sus inicios en el club Instituto de Córdoba, tomándolo como un ejemplo de inmadurez que busca cambiar en los nuevos jugadores. «En mi categoría hacía lo que quería. Pensaba que era siempre así, contestaba mal y volvía a jugar. Creo que ningún club está con esa intención de educar a un pibe que por ahí no entendía nada», reflexionó.

Correa sacó chispas con ácida crítica a jóvenes futbolistas. «Hoy los presupuestos y la plata que manejan los equipos de fútbol y cada jugador son distintos. Tú si quieres ponerte un cono en la cabeza, póntelo. Con tu plata haz lo que quieras, obviamente después no vengas a llorar que estás comiendo arroz con papas».