Contra tots i contra tot

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La Galerna

·30 de mayo de 2025

Contra tots i contra tot

Con la venia.

La charlotada. Apareció Jan Laporta en la tele amiga y, exultante, proclamó al mundo entero su proeza liguera: había derrotado a todos sus enemigos. Su mensaje caló entre sus admiradores, esclavos, amigos y siervos. Desde aquel antológico momento en el que Jan apareció abrazando un maniquí, todos supimos que el culerío está plagado de fernandos galindos dispuesto a engullir lo que sea.

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Los enemigos. ¿A quienes derrotó Jan? Para poner en valor la proeza laportiana es necesario identificar a sus enemigos. De acuerdo con el tenor literal de las palabras de Jan, sus enemigos son todos aquellos actores que han campeado directa o indirectamente por el mugriento fútbol patrio y le han ido poniendo “trabas” a su buen hacer. ¡A numerarse!: prensa deportiva española, Liga de Fútbol de Tebas, Real Federación Española de Fútbol (con Rubi y ahora Louzán), CTA de Cantalejos, VAR gestionado por Tacho Benet, Gobierno de España y, el peor de todos, Real Madrid CF (spoiler: el único enemigo real, aunque a veces no lo parezca).

Como todos ustedes ya conocen sobradamente los hechos, procedo a resumir y juntar cada sangriento enfrentamiento de Jan con uno o varios de sus encarnizados enemigos, y así, dar valor, contexto y visión global a esta homérica hazaña que deja a La Odisea en un simple paseo por El Retiro.

Entre hipidos, un periodista de la Cadena Ser de Barcelona afirmó que conocía lo de los pagos a Negreira desde hacía tiempo, pero que aguantó la noticia hasta que fuese el momento idóneo para el club. Concretamente, febrero de 2023. Increíblemente, un dizque periodista aguantó semejante noticia, pasándose por el arco del triunfo su deontología profesional. La Ley del Deporte vigente en 2023, fijaba la prescripción de las infracciones muy graves en tres años. Desconocemos la fecha exacta en la que los pagos a Negreira fueron conocidos por el periodista: ¿un año antes?, ¿dos?, ¿tres?, ¿más? A la vista del estado compungido del periodista (muy culé) al momento de soltar la bomba, piensen mal y se quedarán cortos. Teniendo en cuenta que las presuntas infracciones muy graves habrían prescrito en 2021, ¿ustedes creen que la elección del “momento idóneo” (2023) para dar la noticia fue casualidad o causalidad?

El 13 de diciembre de 2019, Rubi, presidente de la RFEF, reformaba el Código Ético de ésta para adaptarlo al que la FIFA, a su vez, había adaptado poco antes. Dicho código era de obligado cumplimiento, entre otros, para los clubes de fútbol. Se creaba el Comité de Ética, con potestad sancionadora. El 8 de junio de 2021, en Asamblea General, se retira la potestad sancionadora a dicho Comité y la actuación de oficio. Laporta era miembro de la Junta Directiva de la RFEF desde hacía unos pocos meses. ¿Por qué se degradó dicho comité a la categoría de Negociado de Asuntos Etéreos, Extrasensoriales y Paranormales? (Si tienen curiosidad les recomiendo la lectura del primigenio Código Ético en la parte de infracciones y sanciones. Comprenderán.)

Las palankas de Barça Studios. Ya conocen la historia. Tebas aceptó el plan propuesto por Jan y con los 200 millones aceptados como ingresos, fichó. No se respetaron los compromisos y se constató lo que todos sabíamos dado el hedor que desprendía aquello: todo fue una filfa. ¿Por qué Tebas aceptó aquello y no vinculó el reconocimiento de los ingresos a medida que se fueran ejecutando los cobros?

Jan también fue contra el CTA. De hecho, llegó a afirmar que la Liga estaba adulterada. Son famosas sus diatribas a la salida de aquel juzgado, reclamando un penalti, poniendo, de paso, en duda la imparcialidad y honestidad de todo el CTA. ¿Por qué el CTA de Cantalejos no protestó ni emitió comunicado alguno reclamando respeto para sus honrados jueces? ¿Por qué el jubilado González Fuertes no amenazó a Jan?

También hubo palos para el VAR por la anulación de un gol en Anoeta. Hete aquí que el VAR era gestionado íntegramente por una empresa propiedad de un señor llamado Tacho Benet, culé y socio del FC Barcelona, además de miembro del consejo de administración de Bridgeburg Invest, filial de Barça Studios. No piensen en el conflicto de interés o les explotará la cabeza. ¿Por qué habría de manipularse una herramienta, contra los intereses del FC Barcelona, cuya gestión corre a cargo de la empresa de un señor que gana dinero si el club gana dinero?

6. Volvieron las palankas ficticias y la inscripción de Olmo. El excelente equipo de abogados de Tebas cometió un error al momento de dictar la resolución que no permitía la inscripción de Olmo. Eso posibilitó el recurso de Jan y la solicitud de la cautelarísima al CSD, o sea al Gobierno, que lo concedió. Se interpuso recurso contencioso-administrativo pero el excelente equipo de juristas de Tebas incurrió en otro error, incluso más grosero, y presentó el recurso en la Audiencia Provincial en lugar de la Audiencia Nacional, con el consiguiente retraso en la tramitación del expediente que, a efectos prácticos, deja en nada la resolución del recurso ¿Ustedes creen en las casualidades?

Más casualidades. En marzo de 2021, Jan accede a la presidencia del FC Barcelona. En mayo de 2021, Albert Soler, directivo de dicho club hasta ese momento, es nombrado director general de Deportes del CSD. Por poner contexto: Albert fue directivo culé mientras Negreria elaboraba “prolijos” informes a cambio de miles de euros. En enero de 2023, Soler deja el cargo en el CSD. En febrero de 2023 un periodista muy culé de la Cadena Ser de Barcelona saca a la luz, en el momento idóneo, el escándalo. ¿Sincronización perfecta o una casualidad más? ¿Hubo tapón al escándalo? ¿La marcha de Albert fue por motivos personales o tras el cumplimiento de una misión?

Bajo el mandato de Soler al frente del CSD se elaboró la ley nueva del Deporte (Ley 39/2022) que sustituía la anterior (Ley 10/1990). En la Ley de 1990 los plazos de prescripción se fijaban en 3 años, 1 año y 1 mes para las infracciones muy graves, graves y leves, respectivamente. En la Ley de 2022 dichos plazos se modificaron para las infracciones graves y leves, pasando a ser de 2 años y 6 meses respectivamente. El plazo de prescripción para infracciones muy graves no se tocó. No haré preguntas, señoría.

Hace un mes, aproximadamente, Tebas anunció nuevas medidas flexibilizadoras del control económico. Una de esas medidas consiste en la posibilidad de renovar a un jugador sin que afecte al límite salarial del club, aunque éste esté excedido, siempre y cuando el jugador sea menor de 24 años y haya estado contratado durante, al menos, las tres temporadas anteriores consecutivamente en el mismo club. Séanme sinceros: ¿en qué jugador y en qué club están ustedes pensando?

Y otra casualidad. Sin ánimo de ser exhaustivo, todos sabemos del enorme poder político que cierta región de España tiene en estos momentos. Y todos sabemos, también, el papel político que juega, dentro de esa región, cierto club. Otrosí, también conocemos la afinidad política del señor que preside dicho club.

Hace unos días el TAD archivó la denuncia del Real Madrid contra Tebas, por revelar votaciones secretas. La argumentación utilizada para justificar el archivo da qué pensar. Y ahí lo vamos a dejar. Ahora, procedan a repasar el contenido de los apartados 9 y 10 y no olviden que, de haber prosperado la denuncia del Real Madrid, hoy Tebas estaría inhabilitado. ¿De quién depende el TAD? ¿De qué socio político depende el Gobierno? ¿A qué ideología política es afín Jan? ¿A qué partidos políticos les interesa que Jan siga siendo presidente del FC Barcelona? Ustedes mismos. Pensar, de momento, no es delito.
Reflexión. Todos los actores referidos hasta aquí, tienen su influencia, más o menos directa, en la competición que ha ganado Jan. Y repito una vez más, siguiendo el tenor literal de las palabras de Jan, todos ellos deben ser considerados como sus enemigos. Enemigos a los que ha derrotado, según su peculiar visión de la realidad.

Ahora piensen en el puzle que les acabo de describir someramente. Periodistas que no hacen su trabajo; técnicos expertos en contabilidad que se tragan sapos; excelentes juristas cometiendo errores groseros; árbitros que amenazan o callan dependiendo de quién, con actuaciones escandalosas que les llevan a ser excluidos del mundial de clubes; nombramientos y ceses de altos cargos en la Administración para períodos de tiempo que coinciden al milímetro con la reforma de la Ley del Deporte o la vida o prescripción del escándalo; denuncia ante el TAD contra el presidente de LaLiga por revelar votaciones secretas; al unísono, flexibilización de las normas de control de LaLiga para facilitar fichajes y renovaciones que coincide, otra casualidad, en el tiempo con renovaciones muy significativas; favores políticos del Gobierno de la nación; existencia de un club politizado hasta los cimientos y con una clara afinidad a determinada ideología, imprescindible, a su vez, para el Gobierno de la nación, del cual depende el TAD; y finalmente el archivo de la denuncia contra el presidente de LaLiga.

Me encanta la estadística, sobre todo la estadística inferencial. Qué le voy a hacer, es una pedrada como otra cualquier. Hubiera dado dinero por conocer, de existir, un modelo de distribución de probabilidad que se ajustase a todos los hechos aquí relatados y así poder proporcionales la probabilidad de que siempre haya salido el treinta y seis. Mucho me temo que no va ser posible. Para estos casos es preferible tirar de sabiduría popular: si camina como pato, nada como un pato y hace cuá-cuá, entonces es un pato.

Ya sé que Jan les dirá que no es un pato, que es un elefante africano. Y a quién van a creer ustedes, ¿a las facturas documentadas en informe de la GC o al señor que le cuadriplicó (de 152.186 € a 573.398 €) el sueldo a Negreira por informes fantasma? ¿Al señor que dijo a sus voceros, a la puerta de un juzgado, que la liga estaba adulterada por no sé qué de un penalti en Getafe, o a sus ojos contemplando la violencia consentida contra Mbappé o Vinicius? ¿Al tipo que, a golpe de cortes de manga e insultos, celebró la inscripción política de un jugador, o a sus ojos atónitos asistiendo, jornada tras jornada, al silencio cuasi-prevaricador del VAR de Tacho y Cantalejos? La casuística es tan prolija que daría para un relato sin fin.

Todo lo que han leído hasta llegar a este párrafo obedece a un solo fin: darles el contexto en el que se desenvuelve el Real Madrid. Una vez dicho lo anterior, aunque no lo crean, Jan tiene motivos para estar preocupado. Porque con todo su ejército de “enemigos” sincronizados, funcionando a pleno rendimiento, con sus mozalbetes vendados, sucios, violentos y maleducados saliéndose en cada partido y con su rival plagado de lesiones graves y jugando como si fuera el ejército de Pancho Villa, le ha sacado 4 míseros puntos de diferencia en 38 partidos. Ya les digo yo que, en la misma situación, pero a la inversa, la diferencia no bajaría de 30 puntos y Jan no estaría ni para la Conference.

Por eso debería estar más que preocupado y por eso cuenta milongas sobre guerras y batallas solo aptas para sus fernandos galindos. Porque con que tan solo uno de sus “enemigos” sincronizados se le cayera, solo uno, Jan perdería y, si me apuran, ni siquiera eso sería necesario. Con una leve mejora en la gestión deportiva del Real Madrid, bastaría. Esto lo sé yo, lo saben todos ustedes, lo saben los citados fernandos galindos y lo sabe hasta el senado de peñas del aleti. Pero el que mejor lo sabe es Jan. Le urge hacerse con nuevos enemigos porque va a necesitar un barco más grande para matar al tiburón blanco.

Gracias por llegar hasta aquí.

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