CHAMOT: “JUGADORES COMO MALDINI NOS LLAMABAN PARA DECIRNOS QUE SERÍAMOS CAMPEONES EN EL MUNDIAL 94″ | OneFootball

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Icon: Gianluca Odasso - Via Libre Reconquista

Gianluca Odasso - Via Libre Reconquista

·28 de marzo de 2024

CHAMOT: “JUGADORES COMO MALDINI NOS LLAMABAN PARA DECIRNOS QUE SERÍAMOS CAMPEONES EN EL MUNDIAL 94″

Imagen del artículo:CHAMOT: “JUGADORES COMO MALDINI NOS LLAMABAN PARA DECIRNOS QUE SERÍAMOS CAMPEONES EN EL MUNDIAL 94″
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Con tres mundiales en su espalda (94’, 98’ y 2002’), José Chamot representa un verdadero símbolo del fútbol argentino en los años ‘90 y de cómo el esfuerzo y el sacrificio pueden ser el gran motor para realizar una gran carrera en el ámbito del balompié internacional.

El ex marcador de punta supo destacar desde su etapa en juvenil en Rosario Central, para así lanzar su carrera al fútbol europeo, donde recaló inicialmente junto al “Cholo” Simeone en el Pisa. Desde ese momento, soñaba con poder ser parte del AC Milan, el club italiano que dominaba el fútbol europeo en aquellos primeros años de la década de los ‘90.


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Con mucho esfuerzo, y con una carrera que cuenta en el historial a equipos como el Foggia, Lazio y Atlético de Madrid, finalmente en el año 2001 logró su cometido y terminó incorporándose al club rossonero, con el cual integró planteles de grandísimos jugadores de la talla de Paolo Maldini, Andrea Pirlo o Andrey Shevchenko.

Con el esfuerzo como bandera, Chamot demostró que la motivación y sus sueños eran tan grandes: de ver el Mundial 1986 por la televisión, a los pocos años ya era considerado como una opción convocable por el legendario Carlos Bilardo, entrenador campeón del mundo en México (1986) y subcampeón en Italia 1990.

Desde ese momento, el ex defensor de Rosario Central llegó a ponerse el manto nacional en los Mundiales de Estados Unidos 1994, Francia 1998 y Corea Japón 2002; así como también en la Copa América de 1995 y en los Juegos Olímpicos de 1996, donde logró colgarse la medalla de plata siendo parte de aquel prometedor equipo juvenil dirigido técnicamente por Daniel Passarella, su ídolo de la infancia.

EL VALOR DE JUGAR EN LA SELECCIÓN ARGENTINA:

“Yo una vez me vi en la cancha de River, jugando el desempate contra Australia en el 1993. Ahí me vino a la cabeza todo lo que pasé en mi infancia en Concepción del Uruguay.

Miraba a la izquierda y tenía a Ruggeri, Redondo, Cáceres. Del otro lado, Maradona y toda esta gente… yo me miraba y ahí decía “yo también tengo esta camiseta”.

Uno dice, bueno, “ojalá me toque jugar un Mundial”. Y yo pude jugar tres. Y después la Copa América y las Olimpiadas. El honor de representar a un país, el honor que te da representar un grupo, y dejar mucho sacrificio lejos de la familia, que eso no tiene precio, porque te pierdes momentos con tus hijos y tu esposa que no vuelven para atrás.

Mientras lo dejé todo en la cancha, voy a estar feliz. Si no lo dejé todo, ahí si voy a estar triste”.

SOBRE SU EXPERIENCIA JUNTO A DIEGO MARADONA EN EL MUNDIAL 1994:

“Llegamos al Mundial 1994 y Maradona entrenaba 2 o 3 veces al día, mientras que nosotros una sola vez. Si el Diego entrenaba 3 veces, ¿cuántas tenía que entrenar yo?

Él tenía toda la luz del talento. Se entrenaba 3 veces para llegar al objetivo que tenia él: eso es tener un corazón de león, porque realmente hay que tener fuerza para levantarse, entrenar, y repetirlo una y otra vez. Esa es la pasión que lo abrazaba a él”.

“Nosotros hablábamos con los italianos, y los jugadores nos hablaban por teléfono y nos decían “ustedes salen campeones en el Mundial 94’”. Y hablo de jugadores como Maldini y esos jugadores que conocíamos nosotros. Eso era lo que transmitía el Diego”.

“No sé si en 1994 Maradona era el mejor jugador, porque bajó el nivel por el tema que ha tenido, pero él siempre hizo la diferencia en una cancha”.

¿PUEDE MESSI LLEGAR AL MUNDIAL 2026?

“Primero hay que estar en el cuerpo de Messi. El deporte de alto rendimiento te pasa la cuenta, uno no sabe los dolores que él tiene.

El jugador aprende a convivir con el dolor, a veces uno no sabe esas cosas. Si uno mide lo que es el talento, Messi tiene todas las de llegar al Mundial 2026. El tema es que en estos años esté saludable, en la cabeza y en la parte anímica está en el cielo. Ya ganaron esa Copa, se ganaron el respeto de todo el mundo.

Lo que él va a medir es estar a la altura, por respeto a la camiseta más que todo”.

ACERCA DE LA POTENCIAL VUELTA DE ÁNGEL DI MARÍA A ROSARIO CENTRAL (A partir del minuto 50:30):

“Cuando yo dejé Central en 2005, Di Maria todavía era chico, pero ya estaba empezando. Siempre es lindo ver a los jugadores talentosos: todos quieren la vuelta de Di Maria”.

“La vuelta de estos campeones es con un precio, y que no todos están dispuestos a pagar. El precio es entender que el jugador viene muy gastado, y más un Di Maria. Entonces, si viene y se lesiona, ya lo empiezan a putear. Eso no puede pasar.

A un jugador así hay que honrarlo, hacerlo sentir en casa. Nadie quiere venir a lesionarse. Yo quiero volver a mi casa y estar saludable, y que todos estén contentos”.

“Di Maria es uno de esos jugadores que llena el ojo de la gente. Cuando prepara la gambeta con la zurdita y la clava al ángulo. Yo siempre admiré su calidad, como cuándo definió en la final del Mundial. Mirá si hubiese tenido esa pegada yo…”.

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