Diario La Escuadra
·29 de septiembre de 2024
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Hay leyendas que por mucho que pase el tiempo no pierden su eficacia. Historias que se cuentan con los años y siguen marcando a las generaciones posteriores. Una de esas leyendas, para un aficionado del Celta de Vigo, es la de Iago Aspas. El héroe vigués ha vuelto a aparecer hoy con un gol que ha caído como agua del cielo tras de una acuación de luces y sombras de su equipo ante el Girona. Un Girona que ha recuperado las buenas sensaciones y el juego que le caracteriza, pero ha pecado de conformismo, y que cuando ha querido reaccionar, le ha faltado tiempo.
Los hombres de Claudio Giráldez no ha tardado en mostrar la actutud y la garra que viene caracterizándoles en este arranque liguero con un testarazo con mucha intención pero poca precisión de Carlos Domínguez en el primer minuto de juego, que remataba tras el lanzamiento de un balón parado. El Celta apretaba, pero no acababa de estar preciso ante un Girona que movía el balón con facilidad por el campo, y este dominio ha llevado a la respuesta visitante tres minutos después con la primera ocasión de peligro: un buen remate de Yangel Herrera que Vicente Guaita ha despejado y Abel Ruiz no ha sabido rematar en segunda instancia con la cabeza.
La lesión de Oriol Romeu tras el primer cuarto de hora de juego, sustituído por Donny Van De Beek, ha sido un golpe duro para los catalanes. Sin embargo, los de Míchel han sabido reponerse a la perfección con un dominio del balón claro, combinando muy bien ante un Celta de Vigo que llegaba pero no terminaba de generar peligro. Probaba Ilaix hasta en dos ocasiones, pero bloqueaba bien la defensa delante de un Gazzaniga sin demasiado trabajo.
El premio llegaría en el minuto 38, con un buen centro de Daley Blind seguido de un gran testarazo de Yangel Herrera, que perforó la meta de Vicente Guaita para adelantar a los albirrojos en Balaídos durante una primera mitad que vería como el dominio se convertiría en un toma y daca sin dominador claro y sin peligro aparente.
Con el 0-1 en el marcador, el partido se ha dormido mucho. Los de Míchel se han dejado dominar, pero a diferencia de en otras ocasiones, esta vez se ha sabido dejar dominar. Han cedido la posesión a un Celta que ha movido mucho pero ha generado muy poco peligro a pesar de contar con varias ocasiones a lo largo de la segunda mitad.
Probó Ilaix, luego Marcos Alonso, de nuevo Ilaix… hasta en 5 ocasiones en 20 minutos lo intentó el cuadro celtiña. Pero ninguna llegó a los tres postes. El Girona, por su lado, aguantaba las embestidas de los gallegos con una soltura ausente en los últimos encuentros. Resignados a la defensa, los albirrojos han desplegado un fútbol de contraataque que ha generado poco más que una ocasión de Bryan Gil que ha detenido con solvencia Guaita.
La fortuna acabaría sonriendo a los vigueses tras largos minutos de intentar perforar la portería sin éxito. Sería el eterno salvador vigués, Iago Aspas, quien tras una cesión de Willot Swedberg acabaría poniendo las tablas en el marcador con las que acabaría el encuentro, a pesar de los intentos de ambos equipos de desigualar el resultado.