DaleRojo
·12 de junio de 2025
Brayan León y un gol que nos hizo estallar de júbilo

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Yahoo sportsDaleRojo
·12 de junio de 2025
¡Parce, qué contragolpe el que se mandó Brayan León, una locuraaa! Eso fue como cuando uno ve venir la moto por la acera y uno se quita porque sabe que no hay freno que lo pare. Así mismito fue: arrancó con motor de alto cilindraje, se tragó la cancha con una velocidad berraca y cuando los defensas pensaron en reaccionar, ya los tenía comiendo polvo.
Y vea pues, sin titubeos, Brayan cerca al área como Pedro por su casa y ¡pa! Le pegó sabroso al primer palo, con rabia, con corazón, con el alma. El arquero ni la olió. Fue un zapatazo seco, de esos que no dan papaya. Golazo que retumbó en todo el Atanasio, hermano. ¡Explosión total en la tribuna, grito liberador y abrazo entre extraños!
El poderoso se va arriba al descanso, papá. Uno a cero, pero con el pecho inflado como si fueran cinco. El gol llegó como caído del cielo, pero con el sello de la tierra: puro barrio, pura garra, puro Medellín. El DIM está ganando y eso ya se siente en las calles, en las casas, en los corazones rojos.
Parce, lo de Brayan no fue solo correr y definir. Fue mandar un mensaje claro: “¡Aquí estamos, por la final y por la gloria!” Ese grito sagrado no fue solo de gol, fue de esperanza, fue de lucha, fue de hinchada. El Atanasio tembló con ese estallido, y no era por un terremoto, era por un rugido poderoso.
Y la familia roja, esa que nunca falla, respondió con el alma. Banderas al viento, cantos que reventaban gargantas, ojos brillando de emoción. Esto es lo que mueve al Medellín, parce: la pasión auténtica, el sentimiento que no se explica, solo se vive. ¡Y cómo se está viviendo este cuadrangular, mijo!
Ahora el DIM está más cerca de la final, y no es casualidad. Esto es fruto del trabajo, del aguante, del compromiso de un equipo que se parte el alma por los colores. ¡Vamos con toda, que la ilusión está intacta y el camino se está abriendo a punta de goles y corazón!
Así que parcerito, si vos estabas medio desconectado, este es el momento de enchufarte de nuevo. Lo de Brayan es solo una muestra de lo que este Medellín tiene pa’ dar. Faltan 45 minutos, sí, pero ya dimos el primer golpe. ¡Y fue con clase, con estilo y con toda la berraquera del pueblo rojo!