Brahim Díaz quiere tener un papel más destacado en el Real Madrid | OneFootball

Brahim Díaz espera tener un papel más importante que el de ser un jugador más de la plantilla del Real Madrid, informa Mundo Deportivo.

Brahim Díaz paga por la fe que le tienen

Después de apenas tener minutos durante el inicio de temporada, la lesión de Vinicius Junior ha obligado a Carlo Ancelotti a recurrir al ex mediapunta del AC Milan y el jugador de 24 años no ha defraudado. Curiosamente, las acciones de Díaz han subido hasta el punto de que ahora su DT lo elige por delante de Joselu.

Tras haber marcado tres goles en solo 418 minutos esta temporada, es muy probable que Díaz supere la cuenta de Joselu de seis goles en 969 minutos, con una proporción comparable de goles por partido.

Cabe señalar que fue la lesión de Vinicius la que le dio la oportunidad de hacerse con el primer equipo y el jugador de 24 años la ha aprovechado con actuaciones impresionantes, habiendo contribuido en dos goles (uno anotando y otro asistiendo) en sus dos últimos encuentros.

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Además, su estilo de juego dinámico rápidamente le hizo querer entre los aficionados del Madrid y ahora que las expectativas están puestas en él, se esperará mucho de su rendimiento en los próximos cotejos.

Sus próximas decisiones jugarán un papel clave

En la actualidad, la situación actual de Brahim Díaz relacionada con su compromiso con la selección representa un gran desafío y esto, en cierto modo, afecta su paso por el Real. Por un lado, si bien se trata de su posición dentro del club, también influye en sus perspectivas de representar a la selección de España o Marruecos en la próxima Eurocopa o Copa Africana, respectivamente.

Inicialmente inclinado por elegir España, se enfrenta a un dilema: Luis de la Fuente, el entrenador de la selección española, aún no lo ha convocado y, mientras espera pacientemente, el tiempo se le escapa al jugador de 24 años.

Dadas las circunstancias, Brahim sigue comprometido con sus deberes con la Casa Blanca. La esperanza de que, ya sea vistiendo los colores de una selección nacional o del club, su papel evolucione más allá del de un mero catalizador sigue latente.