Vermouth Deportivo
·1 de octubre de 2023
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·1 de octubre de 2023
Tuvo más empuje y logró justificarlo con el gran cabezazo de Juan Bisanz en el cierre de la primera mitad. Lanús, que terminó jugando con nueve, lleva ocho partidos sin ganar.
Banfield buscó tomar las riendas de un clásico tenso, entre un equipo que quiere despegarse de la permanencia y otro que no encuentra su rumbo en este segundo tramo del año.
El local intentó instalarse en campo rival pero fue Lanús quien leyó mejor los espacios para avanzar en ataque, aunque no logró darle un buen cierre a sus intentos.
Banfield terminaría desnivelando con balón quieto. Juan Ignacio Rodríguez levantó el tiro libre frontal que Alan Aguerre despejó por sobre el travesaño. De ese tiro de esquina llegó el cabezazo goleador de Juan Bisanz.
El ofensivo ganó en las alturas y con potencia venció la respuesta de Aguerre, que tocó sin poder desviar.
Con la obligación de empatar salió Lanús a jugar el complemento, pero tras un cabezazo de Lema a manos de Cambeses se armó un lío con la expulsión de Sánchez Miño.
El lateral regaló insólitamente la pelota a Milton Giménez en la salida, y terminó sujetándolo en puertas del área para evitar el gol. Roja directa por último hombre con más de media hora por jugar.
Banfield entonces manejó con mayor tranquilidad el duelo, pero dejó pasar varios avances claros como para liquidar y el corto resultado mantuvo la tensión en Peña y Arenales.
Lanús jamás pudo salir de su nube y para colmo, a siete del cierre, se quedó con nueve por la doble amarilla a Juan Cáceres.
Banfield pudo liquidar, pero el 1-0 fue suficiente para darle el primer triunfo en sus últimos cuatro partidos, y sacarle cinco a Gimnasia, hoy en zona roja aunque con un partido menos.
Lanús se fue mascando bronca, inmerso en su crisis deportiva y cerca de caerse de la zona de clasificación internacional.
Foto: @CAB_oficial