Arda Güler pide paso con Turquía | OneFootball

El futbolista turco, Arda Güler, está a la espera de que Ancelotti le conceda más minutos y pueda recuperar protagonismo, algo de lo que sí disfruta con la selección otomana

Arda Güler no ha tenido todavía ocasión de demostrar su calidad en la presente temporada. Una de las incógnitas en estos primeros meses de competición es por qué el turco ha perdido tanto protagonismo con respecto al curso pasado. En aquel momento nadie le esperaba y apareció. Le hicieron falta muy pocos minutos para dejar asombrado al Bernabéu con su capacidad goleadora y gran talento. Ahora aguarda desde el banquillo su oportunidad para dar un golpe sobre la mesa y recuperar de nuevo sus galones en la plantilla merengue.

Cuando llegó al Real Madrid pocos habían escuchado su nombre. Pisó Valdebebas como una promesa dispuesta a luchar por algunos minutos residuales de vez en cuando. Venía de destacar en la liga turca y los expertos en fútbol ya avisaron que el chaval prometía. Los blancos apostaron fuerte por el chico y pagaron 30 kilos por él. Mucha confianza hay que tener en sus cualidades para poner tal cantidad de dinero sobre la mesa. El tiempo les dio la razón; no se equivocaron.

Desde el instante en el que se enfundó la elástica madridista ya advirtieron que la clase del chico era descomunal. Sus compañeros se quedaron asombrados por el desparpajo que mostraba en los entrenamientos con tan solo 18 años. Su debut era inevitable más pronto que tarde. Apareció por primera vez contra la Arandina en Copa del Rey y dejó buenas impresiones. A Carletto le debió de gustar y pocos días después lo alineó contra Las Palmas en Liga. A partir de ahí, 10 partidos y 6 goles. Se ganó el cariño de la afición.

Empezó a ser reconocido a nivel mundial y entusiasmaba cada vez que pisaba el césped. Cuando salía era muy probable que viese puerta y si no, provocaba alguna acción de peligro. Su rol al principio era divertir a la hinchada pero con el paso de las jornadas se convirtió en una alternativa más que fiable cuando las cosas se complicaban.

Visto el rendimiento del muchacho, las dudas sobre una posible cesión se empezaron a disipar. Todo el mundo era conocedor de que con la llegada de Kylian Mbappé iba a ser difícil conseguir un hueco entre tanto galáctico junto, pero esto no importaba. La gente quería disfrutar de Güler de forma ininterrumpida. Sus méritos eran más que suficientes para conseguir un aumento de minutos en la presente campaña. De hecho, el madridismo pensaba que así sería.

La Eurocopa fue el estreno de Arda en un gran torneo de selecciones y despuntó desde el primer segundo. Exhibió un amplio repertorio de goles y asistencias que encandilaron a los seguidores del Real Madrid. Esto reforzó más todavía la idea de que su protagonismo en Chamartín iba a ser mayor.

Tres meses hace del comienzo de temporada y la situación no es la esperada. Güler ha desaparecido por completo y parece no tener demasiado peso en los planes de Ancelotti. A principio de este curso el técnico italiano lo ha sacado al campo en los compases finales de algunos encuentros, pero claro, en tan poco tiempo es difícil reivindicarse. Con el paso de las semanas estas oportunidades que le concedían han ido a menos. Aunque es habitual verle calentar junto al córner, nunca termina de quitarse el peto.

El panorama con Turquía es muy distinto. Su temprana edad no ha sido un impedimento para que el entrenador nacional lo considere un imprescindible en sus convocatorias. Ha disputado 16 duelos internacionales en los que ha anotado 3 tantos. Estas estadísticas han hecho que el joven jugador se haga con un puesto en el once titular y se convierta en la nueva perla de su selección.

Los aficionados blancos ya conocen lo que Arda es capaz de ofrecer con su nivel de juego. Un futbolista con un aura especial y gran proyección que puede traer muchas alegrías al Santiago Bernabéu. El gran número de lesiones que hay en el primer equipo y en especial la de Rodrygo Goes, invitan a pensar que Güler dentro de poco puede volver a ocupar la banda derecha del estadio. Todo dependerá de los planes que tenga Ancelotti.