Agente Libre Digital
·24 de noviembre de 2024
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El Atlético de Madrid ganó ayer al Deportivo Alavés 2 a 1 en la jornada 14 de la Liga EA Sports, gracias a los goles de Griezmann, de penalti, y Sorloth que contrarrestaron el gol de Guridi, también de penalti. El Atlético de Madrid tuvo que remontar otra vez esta temporada. Pero, a pesar de la victoria el Atlético de Madrid hizo un partido bastante gris.
En vistas de venir del parón de selecciones, y que varios jugadores rojiblancos estuvieron con su selección, y que el Atlético disputará Champions el martes, Simeone optó por una alineación alternativa. Volvían disputar minutos, después de su respectivas lesiones, Marcos Llorente y Azpilicueta y se daba la titularidad a Lino y a Correa después de varios partidos. Aunque podría haber jugado con el 5-3-2, se vio sobre todo jugando con 4-4-2 formando de la siguiente manera:
El partido comenzó con el Atlético de Madrid intentando llevar la iniciativa e inquietar a la defensa babazorra, pero los colchoneros se mostraban muy imprecisos. En el minuto 7, en el primer acercamiento vasco al área de Oblak, y uno de los pocos en todo el partido, Carlos Vicente intentaba un centro que se estrellaba en la mano de Javi Galán, que se hallaba dentro del área. Por lo tanto, se señaló el claro penalti favorable al Alavés. Guridi no lo desaprovechó y estrenó el marcador. De esta manera, el Alavés sacó petróleo de una jugada aislada. El Atlético de Madrid intentó reaccionar rápido y disputó sus mejores minutos del primer tiempo durante los siguientes minutos, sin estos nada brillantes, pero por lo menos hacía parecer que podía llegar a generar peligro. Pero poco a poco el Atlético de Madrid se volvió completamente plano y previsible en su juego. A pesar de tener una estadística abrumadora de posesión, esto no hacía que el partido perdiera su monotonía. En los últimos minutos del primer tiempo los rojiblancos generaron algo de peligro con alguna internada por banda de Marcos Llorente. En el minuto 19, el Atlético de Madrid tuvo su única ocasión clara del primer tiempo, cuando Lino remató a bocajarro desde dentro del área y el balón se estrelló en el larguero después de ser desviado por la cabeza de Sivera.
Guridi celebrando el gol. Fuente Deportivo Alavés
Claro estaba que el Atlético de Madrid necesitaba hacer mucho más de lo que estaba haciendo para poderse llevar algo. Simeone no pensó distinto y retiró a Javi Galán y Marcos Llorente para meter a Giuliano y Sorloth. Ahora si que empezó a jugar con 5-2-3, siendo Giuliano y Lino los carrileros, Correa y Griezmann actuando de media puntas y Sorloth de referencia arriba.
El Atlético de Madrid salió más lanzado y cercano al área del Alavés, pero solo eso, porque la defensa babazorra seguía sin sentirse para nada amenazada. El hecho de tener a Sorloth posibilitó que se pudieran lanzar continuamente centros al área. El Atlético de Madrid tenía que mejorar para llevarse algo. Simeone lo intentaba metiendo los cambios que le quedaban. Metió a Julián Álvarez en el 59 por Correa, a De Paul por Lino en el 64 y Riquelme por Koke en el 70, sin obtener el cambio de juego esperado. Durante todos este tiempo solo se habían tenido dos ocasiones reseñables, un cabezazo de Lenglet, que no acertó a cabecear bien a pesar de estar solo, y otra de Giuliano, tras una carrera propia, que paró con el pie Sivera. Pero, en el minuto 74, un centro de un entrado desde el banquillo, De Paul, en busca de otro entrado desde el banquillo, Sorloth, terminaba impactando claramente en el brazo de Abqar tras el intento de remate fallido del noruego. No sentó bien esta decisión en el Alavés, pero hoy en día esta jugada se debe sancionar como penalti con el reglamento en la mano. Griezmann tampoco lo iba a desaprovechar y pondría el empate. De esta manera, el Atlético de Madrid, al igual que había hecho el Alavés, conseguía marcar gracias a una jugada aislada. Pero, este gol no supondría un impulso para el Atlético de Madrid y el partido siguió igual que estaba antes del gol. Por suerte, para los colchoneros, en el minuto 86, De Paul se inventó un pase que dejó a Sorloth delante de Sivera. El noruego definió como tiene que definir un 9, a pesar de que no era nada fácil, y batió a Sivera para completar la remontada. El Atlético de Madrid que llevaba haciendo durante todo el partido que no pasara nada, por démeritos propios, convirtió este problema en una virtud en el final del partido y pudo contener perfectamente al Alavés para que no pasara nada en el final del encuentro para llevarse finalmente una victoria tras un partido bastante mejorable.
Sorloth y De Paul celebrando el gol que generaron entre ellos. Fuente Atlético de Madrid