Alfaro no se cree el favortismo y mete proverbio chino: "Todo clavo que sale (...)" | OneFootball

Gustavo Alfaro fue claro y contundente. Paraguay no puede "comprar" el cartel de favorito y dormirse en tan complicada etapa de las eliminatorias.

El seleccionador nacional habló este domingo desde la concentración en Ypané.

En este sentido, Alfaro descartó totalmente que él y los jugadores entren en sintonía con lo que se viene hablando en redes, porque no hay forma de que Paraguay sea favorito.

"La verdad, no. Queríamos transformar con los jugadores a una selección que todos quieren enfrentar, que sea complejo de enfrentar. Somos mortales, como cualquiera. Ecuador, la defensa menos batida, y que empezó con puntos menos. Colombia, de lo mejor que hay. El buen filetero es el que sabe diferenciar el pescado del pescado podrido. Si yo me creo eso (favoritismo), no puedo (ser competitivo). Ojalá que sigamos con la misma actitud (humildad)", manifestó en conferencia de prensa.

El técnico explicó que, así como a las demás selecciones, a la Albirroja le cuesta un montón sacar los resultados, y sin sobrarle nada. "Coincidimos que (contra Chile) nos faltó juego. Nosotros estamos para pelear la clasificación, cada partido nos cuesta muchísimo. Lo sacamos adelante porque tenemos un grupo que tiene un carazón que no le entra en el pecho. Les dije (a los jugadores) 'si no saben sufrir no hubiesen ganado a Chile'. Si sabés sufrir, sabés esperar. Así va a llegar la jugada que te abre el partido", alegó.

Lejos de quedarse en los laureles, Alfaro insitió en no creerse el verso y tener el objetivo bien presente. "Yo no puedo comprar eso (favoritismo). ¿Los triunfos para qué sirven? Para tomar confianza y rearfirmar condiciones. Para eso sirven. Nada más. Yo siento que todavía tenemos una pelea grande con rivales muy complejos. Esos puntos, que parecen poco, son mucho. Para nosotros y para todo el mundo. Yo digo, paciencia", zanjó por ese lado.

Por último, el técnico soltó un concepto bien filosófico para graficar la situación. "Proverbio chino, muchachos. Todo clavo que sale, recibe un martillazo... y vamos abajo. La única manera de que la cabeza no se vaya más de la altura (del cuello), es tener los pies sobre la tierra", sentenció.