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Es el momento decisivo de la temporada y el Atleti tiene deberes pendientes por hacer

Abril, mayo y… ¿por qué no junio? Tres meses finales y decisivos en los que el éxito o el fracaso de una temporada terminan por confirmarse. Junio es para soñadores y solo el tiempo hablará, así que centrando el relato en lo que es totalmente seguro, al Atlético de Madrid le quedan dos meses para terminar la temporada. Y a estas alturas queda mucho trabajo por hacer y camino que recorrer para llegar al lugar esperado que se fijó el pasado mes de agosto. Así que en ese sprint final que comienza el próximo lunes en La Cerámica para el Atleti, el objetivo es el siguiente.

La primera estación de la carrera es una tarea pendiente para los colchoneros este curso. Cada salida lejos del Metropolitano se ha convertido en una obra trágica que rara vez termina bien. Por ello, ante el Villarreal, los de Simeone tienen la posibilidad de empezar el sprint final enmendando los errores del pasado. Una oportunidad que además puede encadenarse con la vuelta a puestos de Champions League, esos que se alejaron tras la debacle en el Metropolitano ante el FC Barcelona. El lunes, con los nueve encuentros restantes de la jornada ya disputados, el Atleti sabrá si esa opción sigue vigente, siendo un aliciente más para el encuentro.

Con ese partido disputado restarán ocho finales ligueras en las que el objetivo prioritario del club estará en juego. Pero esa pelea contará con una carrera secundaria a la que no hay que perderle de vista. La Champions, la dichosa Champions. Tras el encuentro ante el submarino amarillo, Simeone y su equipo tendrán nueve días para preparar la ida de cuartos de final ante el Borussia Dortmund. Un partido de gran importancia de cara a poder tomar ventaja con el Metropolitano como principal aliado en ese camino soñador con el que poder ilusionarse.

No hay lugar para la relajación

Esa competición paralela que tanta expectación genera puede convertirse en una trampa para los intereses colchoneros. A medio camino entre la ida y la vuelta, el Atleti afronta una dura prueba de nivel para las aspiraciones en LaLiga. El Metropolitano tendrá que empujar a los suyos tras lo ocurrido en la ida de cuartos en busca de tumbar al Girona. Esa piedra en el zapato totalmente inesperada que, junto al Athletic, hacen temblar los cimientos de la era Simeone.

Y exaltados por el éxito o heridos por la derrota, Dortmund espera para dictar sentencia y elegir semifinalista. Entonces se sabrá si la carrera paralela continúa o se queda en el camino. Como eso es una incógnita, el relato continúa en el sprint liguero. Ese que llevará al conjunto rojiblanco por Mendizorroza, Son Moix, Coliseum y Reale Arena haciendo escalas de por medio en el Metropolitano. Dos meses, once partidos y… ¿por qué no catorce? Aunque no hay que perder la esencia, once o catorce, pero partido a partido.