Una final ante un ogro | OneFootball

No comenzó bien su andadura el Atlético de Madrid en esta Champions con formato recién estrenado: con una sola y apurada victoria ante el Leipzig y dos sonoras derrotas ante el Benfica (4 a 0 en Portugal) y la injusta (1 a 3) ante el Lille en el Metropolitano, en las tres primeras jornadas. Pero se recompuso como sólo lo hacen los grandes ganando en París 1 a 2, con bastantes dosis de suerte y un gol en el final del descuento, una contundente victoria en Praga por 0 a 6 ante el Sparta y una plácida en el Metropolitano por 3 a 1 ante el Slovan de Bratislava.

Ello le ha permitido situarse, con seis jornadas disputadas, de las ocho que consta la liguilla, undécimo a sólo un punto de los ¡seis! equipos que marcan la clasificación para la siguiente fase de la Champions como uno de los 8 primeros y que, por tanto, evitan el llamado play-in y dos partidos más de desgaste, clasificándose directamente para octavos de final.

Dos partidos quedan, por tanto, para el final de esta liguilla: Para el Atlético, el último partido de ésta, 29 de enero en el Red Bull Arena frente al Salzburgo, parece sobre el papel bastante más asequible del Everest al que se enfrenta este martes a las 21 h en el Metropolitano: el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. Un Bayer Leverkusen que la pasada campaña, primera con el tolosarra al frente, ganó Bundesliga y DFB – Pokal sin perder un solo partido y que, en UEFA Europa League tan sólo sucumbió en la final en su única derrota de la temporada ante ese equipo de autor que es el Atalanta de Gianpiero Gasperini.

Esta temporada andan algo más flojos o menos fuertes, mejor dicho, aunque se mantienen segundos en Bundesliga, a cuatro puntos del Bayern, con una sola derrota, y acumulan, a fecha de hoy, once victorias consecutivas entre todas las competiciones.

Yendo a cómo juegan, lo cierto es que es este Bayer Leverkusen un equipo bastante complicado de descifrar, sobre todo, a priori, dada la gran riqueza táctica de Xabi Alonso y sus numerosos cambios de sistema, incluso dentro del propio partido. Acostumbra a jugar con tres centrales, Edmond Tapsoba, Jonathan Tah y Piero Hincapié (perfil que le vendría muy bien al Atlético, por cierto, por su versatilidad y adaptabilidad tanto a la posición de central zurdo como a la de lateral izquierdo), aunque el ecuatoriano es muy, muy habitual caiga al lateral izquierdo cuando el Leverkusen cierra con defensa de cuatro dejando el lateral derecho para Mukiele o para Arthur. Ya jueguen con defensa de 4 o defensa de 5, las bandas suelen ser habitualmente para el neerlandés Frimpong y el español Grimaldo, dos hombres con mucho recorrido y permanente llegada al área rival.

LEVERKUSEN, GERMANY – JANUARY 18: Florian Wirtz of Bayer 04 Leverkusen (obscured) celebrates with teammates after scoring his team’s first goal during the Bundesliga match between Bayer 04 Leverkusen and Borussia Mönchengladbach at BayArena on January 18, 2025 in Leverkusen, Germany. (Photo by Pau Barrena/Getty Images)

El número y características de jugadores que sitúe Xavi Alonso en la zona central del medio campo depende mucho de si juega con defensa de tres o de cuatro y del carácter que quiera dar a ese mediocampo. Un hombre es fijo, el suizo Granit Xhaka y segundo (Andrich o Palacios) para acompañarle en la sala de máquinas, también; a partir de ahí, si hay solo tres defensas y, por tanto, una posición más en medio campo, podría apostar por dos mediapuntas (el británico Nathan Tella y la ‘joya de la corona alemana’, oscuro objeto de deseo de media Europa, Florian Wirtz), si se decide por un once más ofensivo o meter un tercer mediocentro (Palacios o Andrich) dejando a Wirtz como único mediapunta, si opta por un planteamiento más conservador. Y, si se decide por una defensa de cuatro, lo lógico sería que alinease a Xhaka y Palacios o Andrich como doble pivote y Wirtz en la mediapunta.

En todas estas variantes, la punta de lanza está clara: el checo Patrick Schick un jugador que, tras numerosas vueltas por Europa (Sampdoria, Roma, Leipzig…) parece haber encontrado la madurez y la estabilidad en Leverkusen, un excepcional delantero que, además de marcar goles, sabe “jugar al fútbol”, cosa que no suele abundar.

Como detalle táctico, especial cuidado se habrá de tener si juegan con defensa de tres porque, en ese caso, los dos pivotes y los dos mediapuntas o el trivote y el mediapunta acaban formando un cuadrado en mediocampo, una especie de “jaula” que siempre tiene superioridad numérica frente al rival y de la que es difícil salir.

En resumen, un gran rival para un Atlético que necesitará cuatro, si no los seis, puntos ante los alemanes y ante el Salzburgo para conseguir ese hito de clasificarse entre los ocho primeros porque, aunque suene pretencioso, sí, sería un gran golpe sobre la mesa viendo los equipos que se van a quedar fuera de esas ocho posiciones.