Emboscada en Milán. Laporta lo sabe: La FIFA no quiere al Barça como campeón de Europa | OneFootball

La sombra de la sospecha vuelve a cernirse sobre el FC Barcelona en Europa. Joan Laporta ha sido informado de que la FIFA preferiría que el Barça no se proclame campeón de Europa. Cualquier otro, Inter, PSG o Arsenal, sería mejor visto.

La razón es clara: un título culé sería un golpe muy duro para el próximo Mundial de Clubes, que se celebrará a final de temporada. Un Mundial de Clubes sin el campeón de Europa sería un torneo devaluado.

Dos árbitros muy sospechosos

El Barça, pese a su historia gloriosa y sus cinco Champions, no ha brillado en Europa en los últimos años. Y no ha sumado los puntos suficientes para asegurarse una plaza en el nuevo formato del Mundial de Clubes. Para la FIFA, tener un campeón de Europa ausente en su gran torneo sería un desastre de imagen y logística.

El neceser del árbitro del Inter-Barça lo dice todo | MB

Laporta y la directiva blaugrana son plenamente conscientes de esta situación, y la designación arbitral para el decisivo partido Inter-Barça ha disparado todas las alarmas. El colegiado elegido y, sobre todo, el árbitro del VAR –de infausto recuerdo para el Barça– han generado preocupación en Can Barça.

Szymon Marciniak colocó al Real Madrid en cuartos de final de la Champions League echando al Atlético por el polémico penalti de Julián Álvarez. Antes ya fue  polémico por una clasificación del Real Madrid a la final ante el Bayern en 2024 que fue considerada un fraude. Y luego fue sorprendido con un neceser del Real Madrid entre sus enseres.

La elección de Pol van Boekel para el VAR añade más leña al fuego. Van Boekel ayudó con sus decisiones erróneas a la eliminación del Barça ante el Inter en la temporada 2022-23.

El Barça lo tendrá todo en contra en Milán

La sensación es que desde los despachos internacionales se quiere evitar a toda costa que el club azulgrana levante la orejona.

La UEFA y la FIFA parecen alineadas en este pulso silencioso que enfrenta intereses deportivos y económicos. Aunque en el Barça se respira confianza y se apuesta por dejar todo en el campo, nadie en el club es ajeno a los movimientos externos que podrían condicionar el desenlace.

Laporta ha transmitido a la plantilla la importancia de mantener la concentración y no caer en provocaciones, pero la desconfianza hacia las instituciones sigue latente. La historia reciente ha demostrado que el Barça siempre ha tenido que pelear contra algo más que rivales deportivos. Y este año no parece ser la excepción.