El Real Madrid vence al Barça 89 a 91 | OneFootball

Los 15 puntos y 10 rebotes de Tavares permitieron a los blancos volverse a la capital con la octava victoria seguida contra los culés

El Real Madrid ha vencido al Barça 89 a 91 en el Palau Blaugrana. El conjunto capitalino se ha alzado con el triunfo gracias a las actuaciones de Tavares, con 15 puntos y 10 rebotes, o Musa, que acabó el partido con 15 puntos. Por parte del Barça, los 19 puntos de Punter y los 15 de Parra y Brizuela no fueron suficientes para evitar el asalto al feudo culé.

En cuanto a las alineaciones, los de Joan Peñarroya empezaban con Satoransky, Punter, Anderson, Parker y Fall. Por parte de los de Txus Mateo, el quinteto titular estaba formado por Campazzo, Llull, Deck, Garuba y Tavares.

Nervios a flor de piel

El partido iba a empezar de cara para el Barça, logrando un 4-0 inicial que serviría para acabar de activar a la grada. Pese a este inicio, los merengues no se achantarían, anotando un parcial de 0 a 11 de vuelta, con 8 puntos de Sergio Llull. Ante esta contundente respuesta de los visitantes, aparecería Kevin Punter. El serboamericano acercaría al Barça en el marcador, dejándolo en un 11 a 13.

Con esta situación en el marcador se vería plasmada la tensión que se respiraba en el ambiente, enzarzándose Joan Peñarroya y Llull, los cuales recibirían un aviso de técnica. Con los nervios a flor de piel, el Barça sería capaz de encadenar un parcial positivo, colocando el marcador en un 19-15. Punter iba a alcanzar la friolera de 11 puntos sin descansar en ningún momento del cuarto.

Parker siendo punteado por Campazzo. (@FCBbasket)

El que no era capaz de gestionar sus sentimientos era Mario Hezonja. La estrella croata entraba fría al partido, pitándole una técnica los árbitros tras reírse de uno de ellos por una señalización. El primer cuarto iba a finalizar con el marcador situado un 24-20 para el equipo local.

Intensidad en la pista

El segundo cuarto iba a empezar con aún más intensidad, pero solo en la pista. Dejando de lado el juego físico y el ritmo con el que se disputaba el encuentro, los factores extradeportivos habían desaparecido. Lo que seguía presente era la anotación, empatando a 33 a falta de 3:30 para llegar al descanso.

Brizuela ante Musa. (@FCBbasket)

La dinámica, en este caso, iba a ser blanca, consiguiendo un parcial favorable que los iba a situar 3 puntos arriba en el luminoso, quedándose en un 39-42 a favor de los visitantes. Las grandes figuras del segundo cuarto eran Dzanan Musa para los madrileños y el omnipresente Punter.

Se encendía la mecha

La segunda mitad iba a dar el pistoletazo de salida con una canasta del Madrid. Esto se daba por culpa de un Palau un poco apagado en comparación al resto del partido. Esto iba a cambiar por un par de faltas pitadas en contra de los locales, lo que encendía a la grada, y un mate de Tomas Satoransky por encima de Tavares que hacía temblar el suelo. Pese a ello, el Madrid se situaba 46-52 arriba con 4 minutos transcurridos.

Justo tras ello, los factores extradeportivos volvían al encuentro. Una antideportiva pitada a Garuba, muy protestada por Llull, así como un forcejeo, llegando a encararse entre Fall, por parte del Barça, y Tavares y Garuba, por parte del Madrid, encendían la mecha del partido. Todo esto iba a hacer que la grada cantase al unísono, entonando el «madridista el que no bote» y el «así gana el Madrid» después de pitar tan solo una técnica contra Fall por la trifulca anterior.

Parra lanzando ante Hezonja. (@FCBbasket)

Esto haría reaccionar al Barça, que viéndose hasta 9 puntos abajo, sacaría orgullo para ponerse tan solo 2 puntos abajo a falta de 2:52 del final del tercer cuarto (57-59). Los culés llegarían a igualar el encuentro a 59, pero un dominante Ibaka en la pintura y un triple desde 9 metros de Musa iban a darle una ventaja de 7 puntos a los visitantes, entrando en el último cuarto con un 61 a 68 a favor.

La mandarina

El último cuarto iba a empezar que ni pintado para los blaugranas, defendiendo de forma muy intensa y logrando 5 puntos rápidos al contraataque, dejando un 66-68 en contra en el casillero. El Madrid iba a tratar de solucionar esto, pero los catalanes iban a adelantarse con un 73 a 72. Esto no se quedaría así, entrando en unos minutos donde el liderato cambiaría constantemente de equipo.

Campazzo defendido por Anderson. (@FCBbasket)

La intensidad no iba a decaer en ningún momento, siendo conscientes ambos equipos de la importancia de un clásico para el estado emocional de cara a final de temporada. A falta de minuto y medio del final, el Barça le daba la vuelta al partido, situando un 83-82 en el marcador después de dos canastas de contorsionista por parte de Dario Brizuela.

Esto no serviría de nada después de una mandarina de Llull y un triple de Musa, tiros que dejarían al Madrid 83 a 88 arriba a falta de 35 segundos del final. El final del encuentro aún sería muy ajustado, anotando el Barça canastas de dos rápidas y mandando a la línea de tiros libres a los visitantes, esperando que fallaran algún tiro de 1. A falta de 17 segundos el marcador estaba 87-89.

Al final, el encuentro finalizaría 89-91 a favor del Real Madrid. Deck llegaría a fallar sus tiros libres, pero el rebote cogido por Tavares y una serie de carambolas no permitirían al Barça ganar el partido. Esta victoria blanca no cambia nada de cara a la clasificación de la liga, manteniéndose el Madrid en primer lugar y el Barça en el quinto, pero anímicamente es un gran golpe contra los culés y un chute de confianza para los blancos.