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El equipo dirigido por Quique Sánchez Flores anotó contra el Athletic Club en Bilbao una nueva derrota en su casillero. Van tres consecutivas. No trae últimamente buenas noticias el Sevilla FC para sus seguidores. En el penúltimo partido de La Liga EA Sports de una temporada para olvidar. El conjunto andaluz, desenchufado ya de todos los mecanismos que lo hacían competitivo, vagó por un San Mamés de fiesta. Un invitado perfecto al que batieron dos jugadores vascos en retirada del club vizcaíno. El homenaje perfecto con un convidado de piedra. Solo la ovación a Jesús Navas al retirarse lesionado dejó algo de honor en el maltrecho debe de unos hispalenses desorientados. Que acabe pronto la temporada es el mantra de la afición rojiblanca en esta temporada aciaga.

Primera titularidad de Manu Bueno en La Liga EA Sports

En un once repetido hasta la sociedad por Quique Sánchez Flores, a pesar de haber demostrado encarecidamente que ha perdido el gen competitivo, una de las noticias ilusionaba a la afición del Sevilla FC. La introducción del canterano Manu Bueno en la medular acompañando a Agoumé refrescaba la alineación andaluza. Pero El conjunto hispalense apenas se asentó en el césped de San Mamés. De nuevo salieron al campo con una pájara contundente en los primeros minutos del encuentro. Y el Athletic Club de Bilbao no es de los que perdona. Sendos goles en los minutos 17 y 19 se cargaban el encuentro en su recta inicial. Ver para creer. Marcaban los veteranos Raúl García e Iker Muniain, que se despedían de su afición. En dos jugadas prácticamente consecutivas, ante la indolencia de una zaga en chancletas y pensando ya en la playa.

Tras este mazazo el conjunto hispalense intentó estirar sus líneas. Manu Bueno y Agoumé estuvieron muy activos, de lo mejor del encuentro. La iniciativa que pedía Quique Sánchez Flores se vio en Bilbao a cuentagotas. Jesús Navas era el baluarte hispalense y generaba las aproximaciones más inquietantes a la meta del Athletic Club. Sorprendente la serenidad del capitán del Sevilla FC tras una semana vivida entre noticias. Todo un profesional al que no se le notó el circo mediático sufrido esta semana. Hasta que al borde del descaso el capitán rojiblanco tuvo que abandonar el terreno de juego por lesión, con ovación clamorosa de San Mamés. Cruzan los dedos los sevillistas para que no sea este su último partido de la temporada en La Liga EA Sports. Quique Sánchez Flores daba entrada a Juanlu, un canterano más sobre la cancha.

Manu bueno en su debut en La LIga EA Sports contra el Athletic Club | Imagen: Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images

Una segunda parte digna contra el Athletic Club

Quique Sánchez Flores movió piezas tras el descanso. En la banda izquierda entraba Pedrosa, sentando a Marcos Acuña. Y los cambios aceleraron la marcha de los hispalenses, que comenzaron a generar algunas ocasiones. Comenzaba a tener trabajo Aguirrezabala, meta del Athletic Club. Las atajadas del portero vasco eran la mejor de las noticias para un Sevilla FC que buscaba al menos recortar distancias. Ante la falta de efectividad de los hispalenses, los locales se anotaban buenas aproximaciones que atajaba un serio Nyland. El noruego está siendo uno de los más destacados guardametas de La Liga EA Sports.

Hacia el minuto 85, con poco tiempo para revolucionar un partido en la recta final, Quique Sánchez Flores daba entrada a Hannibal y Mariano. Mal momento para los dos jugadores, necesitados de minutos de calidad y confianza. Pocos entendieron el cambio, y mucho menos la entrada de Alejo Véliz, con el tiempo ya cumplido. El argentino jugó la friolera de 20 segundos. Toda una humillación hacia el joven delantero que nadie entendió. Malas (y extrañas) noticias para los fichajes del Sevilla FC que avaló Víctor Orta. Sin tiempo para más, el colegiado finalizó la jornada festiva para el Athletic Club, mientras los andaluces se retiraban abochornados a los vestuarios.

Un entrenador en el umbral de salida

Quique Sánchez Flores, confirmada su salida del club hispalense, está viviendo un mal final de temporada. Tres derrotas consecutivas empañan su éxito inapelable de salvar al club en tiempo y forma. Pero el fútbol es presente y las malas noticias para el Sevilla FC se acumulan en su haber. Incluido el extraño anuncio anticipado de su adiós. Con todo, sigue dando pasos para dejar a su estela una interesante pléyade de jugadores canteranos que puedan ser la columna vertebral de un nuevo proyecto en Nervión. Si es que Víctor Orta bendice ese deseo. Ante el Athletic Club sumó a Manu Bueno en la nómina de debutantes.

Al margen queda el extraño trato dado a los fichajes de la dirección deportiva en invierno. La humillación de Véliz en San Mamés era evitable. Y los escasos minutos a Hannibal (y los dados a Mariano o a Jordán) bien podrían haber sido entregados a otros jugadores que previsiblemente se mantengan en la órbita hispalense. Hay algo que se nos oculta desde la planta noble en Eduardo Dato. Solo así se entiende la cara de circunstancias de José Castro y José María del Nido ante la clamorosa ovación a Navas por parte del estadio bilbaíno. Algo huele a podrido en Dinamarca. El próximo domingo, ante el FC Barcelona, el Ramón Sánchez-Pizjuán dictará sentencia en la despedida de La Liga ES Sports. Se esperan noticias en el cierre de temporada del Sevilla FC. Y no buenas para algunos, previsiblemente. El respetable tendrá  la última palabra.

Quique Sánchez Flores en su penúltimo partido con el Sevilla FC en La Liga EA Sports contra el Athletic Club. Imagen: Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images