Laporta pregunta y Florentino calla: '¿Cuándo les echarás del Real Madrid?' | OneFootball

Tres meses y medio han pasado ya desde que el FC Barcelona visitó el Bernabéu y salió de allí con un 0-4 a su favor.

Tres meses y medio lleva el FC Barcelona esperando a que las autoridades deportivas y disciplinarias hagan su trabajo. Y que el Real Madrid publique una nota explicando las sanciones que ha impuesto a sus aficionados. Los mismos que mostraron su racismo ante Lamine Yamal y Raphinha en el último clásico del Bernabéu.

Joan Laporta sabe que la Policía ha actuado y ha identificado a los aficionados blancos racistas. También sabe que Florentino conoce su identidad. Pero ni las autoridades deportivas ni el Real Madrid han confirmado las sanciones que han impuesto a esos aficionados..

¿Les habrá expulsado Florentino del Real Madrid? ¿Les habrá prohibido volver al Bernabéu, como ha sucedido en otros clubs? Un misterio, no ha habido nota del Real Madrid.

No se trata de un caso aislado. Las muestras de racismo no se limitan a Vinícius. Alejandro Balde viene de denunciar insultos en Getafe contra él por el color de su piel y contra el Barça.

Pero no pasa nada. Balde no es Vinícius y el aparato de propaganda no pierde el tiempo con él generando alarma social.

Lo que escucharon los jugadores del Barça en el Bernabéu

Silencio, pues. Laporta se quedará con las ganas de saber si se les ha impuesto pena de prisión o una multa. O la prohibición de acceder a un recinto deportivo, como ha sucedido en Valencia y Mallorca.

Tampoco espera Laporta que cierren el Bernabéu total o parcialmente, como sucedió con el Metropolitano, en Mestalla, Villamarín o Coliseo de Getafe. Es "el mejor estadio del mundo", y eso no se puede hacer.

La versión oficialista sostiene que no habrá castigo para el Real Madrid porque el lance no afectó al desarrollo del encuentro. Es decir, que el Real Madrid puede estarle agradecido a Lamine Yamal y Raphinha por no parar el partido, al estilo Vinícius, cuando oyeron los insultos en el corner del Bernabéu.

Allí escucharon insultos que se han hecho virales: "mena de mierda", "puto negro" o "putos moros" o "a vender pañuelos al semáforo".

El Real Madrid se comprometió a hacer algo

El Real Madrid como institución informó de que había abierto una investigación para "localizar e identificar" a "unos pocos aficionados" que insultaron a Yamal. Para luego "adoptar las medidas disciplinarias y judiciales pertinentes".

A día de hoy se desconoce qué medidas disciplinarias y pertinentes ha aplicado Real Madrid. Y sorprende que no lo haya comunicado públicamente dada su afición a redactar notas sobre asuntos relevantes de actualidad.

Un aficionado de Mallorca fue condenado a 12 meses de prisión por insultar a Vinícius. Y, además, prohibiéndole el acceso a recintos deportivos durante tres años.

También por insultar a Vinícius tres seguidores del Valencia fueron condenados a 8 meses de prisión después de pedir perdón en una carta pública. Algo que no ha sucedido con los agresores verbales de Yamal y Raphinha. También se les aplicaron dos años sin pisar un recinto deportivo.

En un comunicado el club blanco expresó: "El Real Madrid seguirá trabajando para proteger los valores de nuestro club. Y erradicar cualquier comportamiento racista en el mundo del fútbol y del deporte".

Vinícius se posicionó contra los aficionados del Real Madrid

Pero ni una línea sobre el castigo ejemplar impuesto a los seguidores no erradicados del Bernabéu.

El tema fue lo suficientemente serio para que Vinícius se desmarcara de la inacción de su club. Y se puso del lado de sus colegas del Barça:  "Lamentable lo que ha pasado ayer en el Bernabéu con insultos racistas. No hay espacio para estos criminosos en nuestra sociedad...

...Todo mi apoyo a Lamine, Ansu y Raphinha. Sé que el Madrid y la Policía van a hacer cosas para identificar y castigar a los culpables", escribió el brasileño.

Pero tres meses y medio después, seguimos sin noticias sobre el escarmiento prometido a los aficionados racistas del Bernabéu.

Por ese hecho fueron detenidas tres personas por la Policía Nacional. En aquel momento se habló de que los acusados se enfrentan a cargos por un presunto delito contra la integridad moral.

El informe de la Policía Nacional era muy claro:  "los acontecimientos ocurrieron al marcar el equipo rival (el Barcelona) un gol y sus jugadores fueron a celebrarlo a la grada. En ese momento, varios espectadores realizaron gestos simiescos, refiriéndose a dos de los futbolistas. Además de proferir expresiones discriminatorias que menoscababan la integridad moral de ambos...

El delito se agrava porque Lamine Yamal es menor de edad

...Estas conductas se convirtieron en virales, lo que hizo que diferentes medios de comunicación a nivel nacional e internacional se hiciesen eco de la noticia por la enorme repercusión pública alcanzada".

La nota de la policía daba al hecho una importancia que el Real Madrid y los organismos disciplinarios le han restado.

Antiviolencia pedía 5.000 euros de multa y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de 12 meses a los aficionados identificados.

Además, el hecho de que Lamine Yamal sea menor de edad agrava el delito de los aficionados madridistas.

Tres meses y medio y Florentino no les echa del club

La Sexta Noticias, que se encarga de lavar más blanco que nadie a través de Antonio García Ferreras, lo explicó así. "El Real Madrid ya tiene localizados a los aficionados que protagonizaron los insultos y gestos racistas a Lamine Yamal, Raphinha y Ansu Fati...

...Y  aplicará sobre ellos las medidas más estrictas en su régimen interno. Estas sanciones del Real Madrid van al margen de los castigos que aplique la Ley. La Policía también tiene identificadas a las personas que profirieron los insultos racistas contra los futbolistas del Barcelona".

Tres meses y medio después, Joan Laporta sigue esperando noticias y sanciones ejemplares. Los violentos de palabra y obra que atentaron contra la dignidad de los jugadores del Barça, uno de ellos menor de edad, han quedado impunes.

Está tardando mucho Florentino Pérez. ¿O es que la lucha contra el racismo depende del color de la camiseta?